Cartas
www.cubaencuentro.com Lunes, 27 de diciembre de 2004 www.cubaencuentro.com

Encuentro en la Red agradece los comentarios, inquietudes y críticas de sus lectores. Las cartas no deberán exceder las 200 palabras e incluirán el nombre y la ciudad del remitente. La redacción se reserva el derecho de editar o resumir los textos.

La cantidad de artículos publicados sobre el tema de los afectos familiares y los recursos para el chantaje y la represión, personificado en la tragedia de la doctora Molina, muestra cuán doloroso es para muchos cubanos que sufren este mismo drama. La razón de origen es la prohibición del gobierno cubano de viajar al extranjero a menores de edad con visas de turismo corrientes, ni solos ni acompañados de sus padres. Para muchos ya es difícil conseguir una de estas visas, otros no han logrado ni una en décadas, y si se consigue, no queda otro remedio que un adulto salga del país dejando atrás a hijos, cónyuge, padres, con la esperanza de algún día reunirse.

Mientras llega el momento de la reunificación definitiva, que para miles nunca llegó, y que para otros no ha llegado aún, a lo que se puede aspirar es al derecho de poder visitar unos días al año a sus familiares alejados por fuerza de las circunstancias, no por ausencia de afecto o desinterés. Lo que reclaman la doctora Molina y su familia, con toda justicia.

Las decisiones tomadas por el gobierno norteamericano de limitar los viajes a la Isla de los cubanos residentes en EE UU, a una vez cada tres años, más el cumplimiento de otros estrictos requisitos, son tan injustas y antidemocráticas como la retención de Molina y otros miles de cubanos en la Isla. Aun siendo diferentes ambas políticas en las formas y en el grado de restricción impuesto, tienen una común esencia antidemocrática: utilizar las relaciones y sentimientos familiares como instrumentos para un choque entre adversarios políticos.

Pero si existía realmente esta situación de irregularidad en los viajes a y desde Cuba, creo que las autoridades de EE UU tenían todos los medios y recursos técnicos y legales para actuar judicialmente contra los individuos sospechosos.

Alberto,
Miami

Referencias
Castigos familiares
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Muy acertado el artículo El último americano. Lamento mucho que Oswaldo Payá se haya equivocado [participar en el entierro del cofre en la residencia de Cason], porque cuando estuvo en Miami se distanció valientemente de las posiciones extremistas que, de hecho, le hacen el juego a Fidel Castro.

José Pérez León

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Creo que los colaboradores habituales de una publicación no debemos ocupar el espacio destinado a las cartas de los lectores. Sin embargo, como lector también de Encuentro en la Red, voy a romper esa norma para referirme a la carta de Manuel Sánchez Couto, donde expresa su disgusto por el artículo La revolución de Noriega, de Arturo López Levy.

En realidad, Sánchez Couto va más allá de expresar su disgusto por el artículo, al amenazar con dejar de leer Encuentro en la Red si dicho autor publica otro trabajo con puntos de vista similares.

Me parece que esa mentalidad monolítica y afán de censura guardan una estrecha relación con el pensamiento y la actitud "fidelista" que este lector parece aborrecer tanto, al punto de encontrarlo donde no existe. Hacer depender la lectura de una publicación, que recoge opiniones diversas, al hecho de no encontrar nunca un punto de vista discordante, es tener una visión muy estrecha. Patentar ese criterio con una afirmación que es ante todo una advertencia, implica ir más allá: aspirar a eliminar cualquier criterio contrario. ¿No es precisamente eso lo que hace el castrismo?

Alejandro Armengol

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Hola Enrisco, eres insuperable. Feliz Navidad.

Gerardo

Referencias
Las neuronas y el poeta
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Muy interesante y esclarecedor el trabajo Castro y Bolivia contra el Che, sobre las condiciones que motivaron la captura y ajusticiamiento del Che en Bolivia. Aporta datos que corroboran la hipótesis de que escoger Bolivia para la experiencia guerrillera continental no fue sino un craso error, incomprensible en hombres que, como Fidel Castro y Guevara, se supone que contaran con toda la información de inteligencia para no caer en él. Todo indica que el Che Guevara fue a Bolivia engañado por Castro. Es imposible que Castro no supiera —contando con el famoso Departamento América— las condiciones exactas que encontraría la guerrilla en Bolivia. El hecho de que la autora se apoye en citas de las declaraciones de los principales militares del Ejército de Bolivia y de la prensa de la época, añade validez documental a lo que puede considerarse una verdad comprobada: la traición de Castro al Che, que se inicia justo cuando comienza a cometer "indiscreciones" con visitantes latinoamericanos a La Habana y en sus propios discursos. Parece que en determinado momento Guevara se percata de que ha sido abandonado porque no hay, de acuerdo con su Diario, "comunicación con Manila". Es también notorio, según las declaraciones que hiciera uno de los más cercanos colaboradores del Che en Bolivia, que el Diario fue 'mutilado' al publicarse en Cuba por primera vez: desaparecieron alrededor de cinco páginas, en las que, presuntamente, Guevara descarga su ira contra el Jefe en La Habana por haberlo traicionado.

Tengo la impresión de que este artículo es mucho más largo y enjundioso que la versión que aparece en Encuentro en la Red. En algunos momentos de su estructura, parece estar indebidamente mutilado. Si esto es así, vendría muy bien que se publicara completo, dada su calidad e importancia.

Rolando R. Carmenates,
Miami

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Si como dice el autor de La revolución de Noriega, "la administración Bush ha manejado con acierto las relaciones con Brasil, Argentina y Chile, precisamente por desarrollar un enfoque creativo, desideologizado y flexible", ha sido porque estos tres países, a su vez, han desarrollado hacia Estados Unidos un enfoque "creativo, desideologizado y flexible". Algo que el gobierno cubano no ha intentado hacia Estados Unidos, más bien lo contrario, durante las oportunidades que otras administraciones —Carter, Clinton— le ofrecieron.

Aunque no suelo utilizar muchas imágenes al referirme al régimen de La Habana, considero válida la de "11 millones de presos políticos", referida a los habitantes de Cuba, al parecer utilizada por Roger Noriega. Sólo le recuerdo al autor que aún las personas con quienes no coincidimos pueden brindarnos ideas válidas; valgan las rígidas limitaciones de expresión, asociación y de movimiento impuestas por el gobierno de Fidel Castro sobre los cubanos, vigentes desde hace cuatro décadas en la Isla, sin modificaciones.

Lamentablemente sí, Castro es "algo más que un carcelero". Ha sido el artífice de un perverso régimen autoritario de izquierda, que ha sobrevivido a la caída de la Unión Soviética por muchas razones, entre ellas, por la férrea represión que ejerce en la Isla no sólo contra los disidentes, de la cual muchos cubanos hemos preferido escapar a enfrentar, como sí hicieron los 75, pero también los cientos de prisioneros políticos que están todavía en las cárceles. Pero de estos no creo que se acuerden ni el señor Zapatero, ni las autoridades cubanas. Sólo con una docena de prisioneros bajo licencia extrapenal fuera, controlados por los aparatos de seguridad cubanos, se cumple el "toma y daca".

Sería bueno que en otro artículo el autor abundara sobre lo que ha calificado como "solución constructiva en torno al centro político cubano", a qué sectores, grupos o individuos del gobierno cubano se refiere —si es que se trata de otros además de Castro—, potenciales entidades internacionales dispuestas a iniciar o a continuar contactos y posibles puntos de la agenda, además de la intención del señor Zapatero y de otros mandatarios europeos de "destrabar" las relaciones con La Habana para que mejor fluyan sus negocios. Es una de esas imprecisiones que requerirían de mayor aclaración en el trabajo de López Levy.

Ana J. Faya,
Ottawa

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Me dio asco el leer el artículo nauseabundo y fidelista La revolución de Noriega. Ataca a Frank Calzón que es una persona decente, honesta y que trabaja por la causa de Cuba a todas horas. El ataque a EE UU y Noriega demuestra el odio que trata de propagar el autor como buen socialista.

Si Castro se mantiene en el poder después de la desaparición de la Unión Soviética es por que mata de hambre al pueblo para que los familiares en el extranjero envíen dólares de los cuales él se apodera. La otra fuente de ingresos consiste en la explotación de la clase obrera en Cuba. El auge del turismo se debe a que el Amo alquila a los empleados, cobra en dólares y les paga en pesos. A las empresas hoteleras españolas les viene muy bien el negocio. Tienen a un esclavo que no puede pedir aumento salarial, le pagan menos al Amo de lo que se paga en los países libres por el mismo tipo de empleo y, por lo tanto, pueden ofrecer vacaciones a menos costo y a la vez de obtener mayores ganancias.

Si este individuo sigue recibiendo en este espacio para propagar el odio, creo que voy a dejar de leer vuestra revista.

Manuel Sánchez Couto

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El artículo El oficio de mentir muestra parte de los problemas que tendrán los historiadores, en el futuro, para escribir el capítulo dedicado a estas casi cinco décadas. La prensa oficialista puede ser la fuente para mostrar el arte de la manipulación. Pero debemos reconocer que nombraron bien la actividad: se trata de un Festival. Nadie puede tomar en serio toda esa retórica y, los que hoy reciben premios por mentir y manipular, mañana los veremos como grandes arrepentidos.

Miguel Antonio

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El artículo Elogio del apagón es tan breve como confuso acerca del carácter supuestamente iluminador del apagón. Si el autor pretendía hacer humor a través del uso de la ironía, a mi juicio, no lo logra: se queda si acaso a medias, porque ni siquiera a tres cuartos.

Siempre resulta irritante leer a alguien que trata de escribir sobre lo que no conoce. El autor no tiene ni idea de cómo vive el hombre en los países industrializados y lo que hace es repetir toda la monserga que el comunismo tropical cubano ha reinventado acerca de la alienación, la tecnologización y el antiespiritualismo de las sociedades altamente desarrolladas.

Por eso es que lo trata de "infeliz que está agonizando de civilización", le mete en laticas toda su comida, le amputa las piernas y se las cambia por neumáticos, le convierte su casa en un laboratorio donde el Internet le roba el alma y como resultado de todo eso lo declara "perdido". Para rescatarlo de su caída en barrena y regresarlo al paraíso, la fórmula secreta es el apagón; o sea, el regreso a la oscuridad y a la bestialidad de las cavernas.

De paso, y como quien no quiere las cosas, nos amenaza con un próximo artículo en el que defenderá esa tesis del cubano polisensorial. También aprovecha para alinearse con el gobierno cubano en su repudio por la Ley Helms-Burton, y para borrar de golpe y porrazo a la disidencia, que ahora resulta ser que es de "ayer", y que ante la amenaza de tal Ley "cierra filas" junto al gobierno cubano.

Rolando R. Carmenates,
Miami

Referencias
La Habana: Elogio del apagón (RAFAEL ALCIDES)
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Desde hace 6 meses vivo en México, pero desde que estaba en Cuba leía a diario Encuentro en la Red. Me parece extraordinario el trabajo que realizan, gracias a ustedes mucha gente lee a diario la verdad sobre Cuba. Me impresiona sobre todo la inmediatez de las noticias, cómo están pendientes todo el día del acontecer de Cuba. Los felicito.

Yohancy Perdomo

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