El pianista cubano Chucho Valdés ha sido demandado en Estados Unidos por planear un matrimonio fraudulento para obtener ganancias personales y burlar el embargo estadounidense a la Isla, informó el diario El Nuevo Herald.

Valdés tendrá que responder ante un tribunal por la demanda presentada este viernes en la Corte Superior del condado de Bergen, en Nueva Jersey, por su actual esposa, Ileana Regla Mateu, de 49 años, quien lo acusa de actos de extrema crueldad, adulterio y fraude cometidos durante el matrimonio que ambos contrajeron el 27 de agosto de 2002.

Los argumentos de Mateu, una cubanoamericana que reside en EE UU desde 1968, abarcan las relaciones del artista con el gobierno cubano, debido a presuntas estrategias para ocultar a las autoridades de la Isla sus ingresos e intenciones de adquirir la residencia permanente en EE UU.

Según expresó el abogado Gilberto García, quien representa a Mateu, "lo interesante de este caso es que Fidel Castro se ha pasado la vida calificando a los cubanos exiliados como 'la mafia de Miami', de espaldas a la verdadera mafia que tiene en su país".

García añadió que esta demanda podría derivar en un segundo juicio civil con jurados para dirimir los daños personales causados a su cliente.

El rotativo apunta que de acuerdo con la demanda, Mateu y Valdés se conocieron en enero de 2000, cuando ella regresaba de La Habana tras una visita familiar. Posteriormente, Mateu viajó a otros países y ciudades estadounidenses para asistir a los conciertos del pianista, pagándole comidas y hasta la ropa pues el músico decía que sólo podía obtener 100 dólares diarios por las restricciones de la Oficina de Control de Bienes Extranjeros del Departamento del Tesoro.

Sus relaciones amorosas datan de julio de 2002, y justo un mes después Mateu recibió una llamada telefónica desde La Habana en la que Valdés le solicitaba matrimonio.

Agrega la demanda que éste se había casado en Cuba con una joven de 19 años en septiembre de 2001 y decidió romper el matrimonio apenas cuatro meses después.

El texto recoge que "irónicamente, ese matrimonio y divorcio ocurrió poco después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, cuando las restricciones de viaje de los músicos de Cuba se reforzaron significativamente".

Mateu conoció de la relación anterior de Valdés en julio de 2003, cuando éste presentó su solicitud para residir de manera permanente en EE UU ante el Servicio de Inmigración y Aduanas. Antes, el artista había suscrito una carta que justificaba la represión contra los disidentes y el fusilamiento de tres personas por el gobierno de Castro.

En palabras de Mateu, Valdés le había dicho sentirse cansado por las constantes demandas del ministro de Cultura, Abel Prieto, y las exigencias del gobierno cubano, además de su intención de abandonar la Isla con carácter permanente.

La demandante mencionó también que el artista tenía dos pasaportes cubanos: uno para viajar desde La Habana a República Dominicana, y otro para entrar en EE UU.

Valdés hizo a Mateu su administradora de negocios. Ella fundó la corporación La Perla Cubana, con ingresos ascendentes a los 136.000 dólares en concepto de conciertos realizados.

En la declaración anual de impuestos el músico alegó excesivos gastos por giras y conciertos, por lo que Mateu no recibió ganancias.

El cargo de adulterio está relacionado con declaraciones recientes de Valdés en Buenos Aires, al presentar como esposa a la argentina Lorena Salcedo, de 29 años y estudiante de percusión.

El cubano no se presentó a las citas del 2 de marzo y 4 de junio para legalizar su estatus como residente permanente en EE UU. Y el parole especial que le otorgó el Departamento de Estado expiró el pasado 4 de julio.