¿Qué cartas maneja la opinión pública holandesa con relación a Cuba?

En Holanda hemos avanzado mucho más que en otros países. En Bélgica hay un canciller…

¿Louis Michel? ¿El que se hizo la foto de la Harley Davidson?

Horrible, una ofensa y una humillación para los cubanos. Siempre hay alguien que pasa sobre su realidad y su dignidad.

Michel es el portavoz de toda esa corriente de mantener el diálogo político con Castro… cuando en verdad se trata de un monólogo. De un monólogo de cinco o seis horas, se pasan una noche entera tomando ron y escuchándolo. Eso es. Ningún diálogo. Me lo ha confirmado algún empresario: tan pronto alguien comienza a decir algo "negativo", como cuestionar la detención de los 75 disidentes, entonces Castro simplemente no lo acepta. Nadie quiere correr ese riesgo, todos quieren estar en la Isla cuando los otros vengan, y por eso están dispuestos a soportar cualquier violación de los derechos humanos.

Me pregunto cuál será la respuesta que dará la gente en Cuba, la gente que va a tomar el poder tras la transición, a los inversores que colaboraron con su opresor durante tantos años. Cuál será, no lo sé. Hace años un funcionario de la embajada española en La Habana me dijo que creía que la ira de la población se dirigiría, primeramente, contra los españoles. Él mismo lo dijo: contra los empresarios españoles.

Qué interesa un Premio Sajarov, si pocas semanas después Poul Nielsen, comisario europeo, abre una oficina allá para facilitar la entrada de La Habana en Cotonou, y celebra con champaña. Imagínate qué golpe para la población cubana, que supo a través de Radio Martí lo del Premio Sajarov, y pocas semanas después descubre este teatro. ¿Qué credibilidad tiene eso?

Después del castrismo, ¿qué ocurrirá?

Creo que el escenario que pinta Carlos Alberto Montaner es el más cercano a la realidad. La mafia se está preparando. Los capos militares ya están discutiendo qué hacer cuando el barbudo se vaya, pues ya parece un enfermo mental.

¿Y la población qué? Creo que tenemos que preparar a Europa para que exija que la gente que con mucho valor y mucho peso moral ha luchado durante estos años esté ahí, como parte activa y dirigente de la transición. Que haya un Estado de justicia e independencia real, para que no se repita la misma dependencia, la misma tiranía en otra forma. No se debe repetir el caso ruso, en el que inmediatamente después de la caída del comunismo la mafia controló el país. Ahora, el problema es cómo sacar a la mafia del país, de la economía, de la política. Puede ser un mal que dure mucho tiempo.

En definitiva, no creo en lo que Castro todo el tiempo está diciendo y advirtiendo a la población para que tenga miedo al cambio: que los lobos entrarán masivamente en Cuba.