www.cubaencuentro.com Jueves, 21 de octubre de 2004

 
  Parte 1/3
 
Cubano y universal
'La inserción de Cuba en el mercado internacional dependerá de productores, arreglistas, y publicistas', opina el compositor Cheín García Alonso.
por ARMANDO LóPEZ, Nueva Jersey
 

"Va a llegar el momento en que no se podrá decir: 'esto es música cubana'. La época de los nacionalismos musicales está pasando. Los ritmos ya no pertenecen a nadie. La música se vuelve universal. ¡Es la globalización!", afirma el cubano Cheín García Alonso, uno de los más exitosos autores musicales.

Ch. Garcia
Chein García.

Sus temas los cantan desde Enrique Iglesias hasta Santana y el grupo mexicano La Mafia. Es un gordísimo ocurrente, con un acusado sentido del humor, que colecciona cuadros de Botero y gordos de cerámica y escribe poemas para burlarse de amigos, enemigos y hasta de él mismo. Nos recibe en su estudio, en el sótano de su casona de Newark, amplio, acogedor, habilitado para lo que sea, donde hay una cocina, un piano, varios sofás, un jacuzzi, una nevera con cuantos sabores de helados existen y una perra labrador que se come los abrigos. Nos sentamos en dos sillas de rejillas, reclinables, que contrastan por su sencillez entre tantas consolas de audio y sofisticados aparatos con botones inimaginables.

La música le ha dado comodidades, pero muchos de los que cantan sus canciones no saben que son suyas. ¿Se esconde?

Las estaciones de radio no mencionan jamás al autor de la canción. El autor forma parte de la maquinaria industrial, como el orquestador, el editor, el publicitario, o el diseñador de la carátula de un disco. La época de Agustín Lara ya pasó. A muchos compositores los conocen por ser productores y agentes de artistas.

¿Entonces, por qué no se ha metido a productor?

Sería excelente, porque si el compositor es el productor de un disco siempre va a colocar sus canciones para ganar más dinero, porque la música es un negocio. Si hasta ahora no produzco, quizás sea un poco por vagancia. No es fácil mover este cuerpecito. Hago las cosas cómodamente, a como caigan, las que me hacen sentir bien, material y espiritualmente.

Hoy se baja música de Internet, se copian CD y se compran grabaciones piratas a la tercera parte de su precio. ¿Cree que las disqueras podrían llegar a desaparecer?

La Sony acaba de lanzar para la calle a miles de trabajadores. Todavía la calidad del CD de fábrica es superior a la música que bajas en el formato mp3, pero la tecnología no la para nadie. Dentro de un año o dos, la calidad será la misma. La industria del disco va a tener que cambiar, y no sólo el disco, sino los medios en general, el cine y la televisión, porque ya se ve venir, que puedas bajar en tu computadora cuántas películas quieras.

¿Qué sucederá con los autores? ¿De qué va a vivir?

Volveré a enseñar literatura en la universidad o seré disc jockey, que así comencé en la música. Cuando llegué de Cuba estaba de moda poner música en las fiestas para que la gente bailara, y mi hermano y yo, adolescentes, compramos una consola, para mezclar discos. Nos salió tan bueno el negocio que estudié Ingeniería Eléctrica trabajando de disc jockey. Pero duré sólo una semana de ingeniero eléctrico en la Bell, no soportaba estar encerrado entre planos. ¡Qué aburrimiento! Volví a las fiestas, donde me pagaban por divertirme. Me iba tan bien, que pretendí organizar un concurso de baile, con premios para las parejas ganadoras, pero nadie quiso participar. Ahí está la fecha de mi primer fracaso en el negocio de la música: 12 de octubre de 1974.

Cheín apunta a tres horrendos trofeos, aplastados entre los muchos discos de oro y platino que ha ganado como compositor de canciones. ¿Cuándo comenzaste a componer música?

1. Inicio
2. En el verano...
3. ¿Cuándo aparece...?
   
 
EnviarImprimir
 
 
En Esta Sección
Para Bailar con Salvador
IVETTE LEYVA MARTíNEZ, Miami
La confusión argentina
GABRIEL SALVIA, Buenos Aires
'Castro se cree superior a Alejandro'
MIGUEL RIVERO, Miami
Editoriales
Sociedad
Cultura
Internacional
Deporte
Opinión
Desde
Entrevista
Buscador
Cartas
Convocatorias
Humor
Enlaces
Prensa
Documentos De Consulta
Ediciones
 
Nosotros Contacto Derechos Subir