Experto japonés evalúa calidad de la atmósfera en La Habana

Según el experto de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón, Mitsuhiro Yamamoto, la actual contaminación atmosférica en Ciudad de La Habana se debe, entre otras causas, al humo procedente de las industrias localizadas en la urbe, y a las emanaciones de gases producidas por automóviles y otros medios de transporte que circulan por la ciudad.

En un estudio realizado por Yamamoto en la capital cubana durante dos meses, se considera que si bien la contaminación no alcanza los rangos catastróficos de Ciudad México y Santiago de Chile, posee grados significativos que requieren de inmediato una atención sistemática, a fin de evitar en el futuro situaciones como la mexicana y la chilena.

Contaminación de un río en la ciudad de Camagüey

Se ha reportado una fuerte contaminación en el río San Pedro, cuyo curso medio atraviesa la ciudad de Camaguey. Según un despacho de Cubanet, la corriente recibe residuos sin tratar de una fábrica de acetileno, el hospital provincial, una planta pasteurizadora de leche, varios mataderos, el poblado de Jimaguayú y de los drenajes de la propia capital provincial, entre otros.

La situación se agudiza por la existencia de numerosos basureros localizados en las orillas del río, que convierte a la corriente en vehículo para mover la contaminación por la urbe.

La agencia Cubanet indica que varios de los afluentes tributarios del San Pedro, que irrigan la cuenca donde se ubica la ciudad, también presentan altos niveles de contaminación.

La Habana promueve explotación petrolera en el Golfo de México

El gobierno cubano efectuó una fuerte labor de mercadeo el pasado mes de marzo en el V Congreso de Geología y Minería (GEOMIN 2003) para promover la explotación petrolífera en la llamada zona exclusiva de Cuba en el Golfo de México.

El evento, celebrado en la capital mexicana con unos 300 participantes de unos diez países, promovió contratos a riesgo para que inversionistas extranjeros realicen búsqueda y exploración de petróleo y gas en la mencionada zona, situada en la franja de exclusión marítima de Cuba, al norte de Pinar del Río y La Habana.

Hasta la fecha, sólo lo compañía española Repsol ha invertido en la zona exclusiva del Golfo y, según las autoridades cubanas, la Sherrit, de capital canadiense y con fuerte presencia en Cuba, se apresta a hacerlo.

La explotación de hidrocarburos en la zona exclusiva es una potencial amenaza para la industria turística en el sur de la Florida, donde existe una prohibición a las perforaciones petrolíferas.