Decenas de disidentes fueron detenidos el martes en todo el país, acusados de conspirar con el jefe de la Oficina de Intereses de Estados Unidos, James Cason, a quien se le han limitado los movimientos en la Isla, según un comunicado de la cancillería cubana, informó la AFP.

"Varias decenas de personas, directamente vinculadas a las actividades conspirativas que lleva a cabo el señor Cason han sido arrestadas por las autoridades pertinentes y serán sometidas a los tribunales de justicia", dijo el texto difundido por la televisión oficialista de la Isla.

"No se puede pensar que los actos de traición al servicio de una potencia extranjera, que ponen en riesgo la seguridad y los intereses de nuestra heroica patria, puedan gozar de impunidad garantizada", agregó.

Consultado telefónicamente, el opositor Elizardo Sánchez Santacruz, presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, dijo a la AFP que "en este momento está en marcha la más intensa oleada de represión en un marco de 10 a 12 horas" contra los disidentes internos.

Señaló que por lo menos dos o tres decenas de opositores han sido arrestados en diferentes provincias del país.

La cancillería añadió que debido a las "provocaciones" y actividades "subversivas" desarrolladas por Cason en sus seis meses de misión en Cuba, el gobierno cubano limitará sus movimientos dentro del territorio nacional.

Esta decisión fue tomada "en reciprocidad" a las medidas adoptadas por Estados Unidos con el personal diplomático cubano en Washington, dijo el comunicado.

Las llamadas Mesas Redondas, destinadas a orientar las posiciones sobre temas principalmente políticos, dedicaron dos días de sus debates a las "groseras provocaciones" de Cason, quien desde su llegada a Cuba, el 10 de septiembre de 2002, ha sostenido numerosas reuniones con la oposición interna en varias provincias.

Cason, de 58 años y carrera diplomática de tres décadas, "no es un improvisado, no es novato, su total proceder provocador no es ingenuo", han dicho los panelistas, quienes también acusan de "traidores" y "empleados a sueldo" de la Oficina de Intereses a los disidentes que se han reunido con Cason.

Según dijo en una de las Mesas Redondas el Director del Centro de Estudios Históricos de la Seguridad del Estado, Manuel Hevia, Cason realizó un viaje de monitoreo a la provincia de Villa Clara, entre el 3 y el 4 de octubre pasado, y se entrevistó con al menos 10 opositores.

Los funcionarios norteamericanos realizaban hasta ahora viajes de monitoreo por el país para verificar si los inmigrantes devueltos por Washington, en virtud de los convenios migratorios, habían sido reinsertados socialmente, tal y como se comprometió Cuba.

En noviembre del año pasado, Cason viajó a Ciego de Ávila, y entre el 19 y el 25 de enero de este año a las provincias de Las Tunas, Holguín, Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo, para contactar con opositores, señaló Hevia.

Además, el diplomático prestó la pasada semana su residencia en La Habana para que los periodistas independientes de la Isla realizaran un taller, y asistió el pasado 24 de febrero a la actividad organizada por la opositora Asamblea para Promover la Sociedad Civil, para conmemorar el inicio de la última guerra de independencia de Cuba contra España, en 1895, y la muerte de cuatro pilotos de la organización del exilio Hermanos al Rescate, derribados por cazas del gobierno cubano en 1996.

En esa ocasión, Cason formuló diversas críticas a La Habana y afirmó que "el gobierno cubano tiene miedo, miedo a la libertad de conciencia, miedo a la libertad de expresión, miedo a los derechos humanos".

En las últimas semanas las autoridades de la Isla han arremetido en reiteradas ocasiones contra Cason. El propio Fidel Castro ha amenazado con cerrar la Oficina de Intereses de Washington en Cuba.

Algunos observadores en La Habana han visto la detención masiva de disidentes como el inicio de la respuesta en hechos contra las actividades de Cason.