AFP/ París. Unos 30 de miembros de la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) e intelectuales cubanos y franceses ocuparon durante cuatro horas este viernes la oficina de turismo de Cuba en París, para denunciar la reciente oleada de detenciones de disidentes en la Isla, constató un periodista de la AFP.

Los manifestantes invadieron la oficina hacia las 10:00 locales (08:00 GMT), colocaron una banderola con el lema "Cuba igual cárcel" y transformaron la vitrina en una celda con fotos de periodistas detenidos como Raúl Rivero, Mario Enrique Mayo y Jorge Olivera, detrás de unas rejas simuladas con bandas adhesivas.

Los escritores cubanos radicados en París, Zoe Valdés y Eduardo Manet, así como el director de cine francés Jean Jacques Beneix, el cantante Yves Simon y el escritor Marek Halter participaron en la operación que sorprendió de mañana a los atónitos tres cubanos que se encontraban en la oficina.

"El objetivo es doble", explicó a la AFP el secretario general de RSF, Robert Menard. "Queremos llamar la atención del público y de los políticos sobre esta oleada de detenciones, la más importante de los últimos años, para impedir que pase desapercibida como lo desea Fidel Castro en medio de la crisis iraquí".

"Además queremos que la Unión Europea (UE) suspenda sus negociaciones actuales con Cuba para su adhesión al acuerdo de Cotonou", agregó. "En dicho acuerdo hay una cláusula de democracia y respeto de los Derechos Humanos", recordó.

"En Cuba, años de cárcel esperan a los que piden un poco de libertad", aseguró el responsable de RSF, organización que defiende por el mundo la libertad de prensa y que realizó el año pasado una operación del mismo tipo contra la oficina de turismo de Túnez en la capital francesa.

El escritor cubano Eduardo Manet declaró que participó "en esta operación simbólica y fundamental para manifestar nuestro apoyo a los detenidos". "Es necesario que se diga que todo va mal en Cuba desde el punto de vista económico y de las libertades humanas", agregó.

Fidel Castro "se burla del Papa, se burla de Jimmy Carter, se burla de todo el mundo", agregó Zoe Valdés. La escritora mantuvo una conversación telefónica desde la Oficina de turismo de Cuba con Blanca Reyes, esposa del periodista detenido Raúl Rivero.

"Tienes que tener mucha fuerza", le dijo, "estamos contigo, estamos con Raúl y estamos con tu hija".

Según un miembro de RSF, la esposa del periodista detenido le dijo por teléfono que "se encuentra en estado de desesperación total".

El director de la oficina cubana, Miguel Brugueras, llamó a la policía que desplegó a varios efectivos en los alrededores sin desalojar a los ocupantes. Sólo intervino en una ocasión para separar a los manifestantes de los miembros del servicio de seguridad de la embajada cubana que intentaban arrancar la banderola y las fotos.

RSF tomó la decisión de evacuar la oficina a las 14:00 locales (12:00 GMT), hora que coincidía, según explicaron, con el inicio del juicio en La Habana de Raúl Rivero, periodista que recibió en 1997 el premio de la organización, y de Ricardo González, corresponsal de RSF en la Isla.

La operación tuvo lugar tras la reciente detención de 78 opositores al régimen de Fidel Castro, en una de las peores oleadas de represión de las últimas décadas en Cuba.

Los detenidos comenzaron a ser juzgados el jueves bajo la acusación de "actuar contra la independencia o la integridad territorial del Estado", un delito que puede ser castigado con penas que van desde los 10 años de cárcel hasta la prisión de por vida.

Los fiscales solicitan cadena perpetua para 12 de los imputados, en un hecho inédito contra opositores que se expresaban sin emplear la violencia, en las más de cuatro décadas que lleva Castro en el poder.