AFP/ Lima. Las relaciones entre Lima y La Habana se han vuelto más tensas después de la aprobación en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU de una resolución que tuvo entre sus patrocinadores a Perú.
Lima llamó a consultas a su representante en la Isla, Juan Álvarez, y entregó una nota de protesta al embajador cubano por las críticas de La Habana a la posición asumida por el gobierno de Perú.
"Se admiten las discrepancias pero no el insulto", dijo el sábado el canciller peruano Allan Wagner, y anunció que Lima esperaba la llegada de su embajador en La Habana "para realizar una evaluación integral de ese asunto".
El viernes, el diario oficialista cubano Granma calificó de "miserables títeres latinoamericanos" a Perú, Costa Rica y Uruguay, por presentar un proyecto de resolución sobre Cuba en la 59 sesión de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU.
Además, el representante del gobierno de la Isla en Ginebra llamó "repugnantes lacayos" a esos países y a Nicaragua, tras la aprobación de la moderada resolución que sólo invita a las autoridades de la Isla a aceptar la visita de la enviada especial del Alto Comisionado de los Derechos Humanos, la jurista francesa Christine Chanet.
Perú considera las declaraciones del gobierno cubano de "impropias" e "incompatibles con las relaciones peruano-cubanas", dijo Wagner. "Vamos a actuar con firmeza y serenidad", aseguró.
Según el jefe de la diplomacia peruana, se trata de "una incapacidad de algunos funcionarios del gobierno cubano" para reconocer que los derechos humanos son universales.
En ese sentido, explicó que el ánimo peruano fue cooperar para romper la cadena interminable de resoluciones de condena a La Habana ante la Comisión y mediante el envío de una relatora de Derechos Humanos a la Isla. |