AFP/ La Habana. Las autoridades cubanas reforzaron el jueves la vigilancia alrededor de la embajada argentina donde, según informaciones procedentes de Buenos Aires, se refugió la neurocirujana disidente Hilda Molina, de 61 años, junto a su madre, Hilda Morejón, de 84.
La legación argentina, ubicada en la calle 36 del barrio habanero de Miramar, mostraba un refuerzo de la guardia, mientras varios funcionarios transitaban nerviosamente por sus jardines sin responder a las consultas de la prensa.
"Son dos mujeres las que ingresaron (…) a la embajada y, al parecer, se negaron a retirarse de allí", dijo a la AFP un vecino de la sede diplomática, que se identificó como Yoel Leiva. "Eran dos mujeres mayores de edad", agregó.
Un pequeño grupo de curiosos se reunió en los alrededores de la representación de Buenos Aires, donde también se congregaron reporteros de la prensa extranjera en busca de información.
Un funcionario de la embajada indicó telefónicamente a la AFP que no están autorizados a dar ninguna información sobre el tema y rehusó confirmar si Molina y su madre se encuentran en el lugar.
Pero en Buenos Aires, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, el oficialista Jorge Argüello, dijo que Molina "está dentro de la embajada".
"Ayer ingresó a la sede diplomática y pernoctó en territorio argentino", afirmó Argüello.
El diputado dijo que "el pedido de asilo no se ha verificado" hasta el momento, e indicó que en caso de confirmarse "la decisión de otorgarlo está en la cabeza del presidente Néstor Kirchner". |