La doctora disidente cubana Hilda Molina, se refugió con su madre en la embajada de Buenos Aires en La Habana, con la intención de pedir asilo político, informó este jueves la edición en Internet del diario argentino La Nación.

Molina, de 61 años, neurocirujana y ex funcionaria del gobierno cubano, es madre del médico Roberto Quiñones, quien reside en Argentina.

Desde hace 10 años reclama la posibilidad de salir de la Isla para reunirse con su hijo y conocer a sus nietos Roberto Carlos y Juan Pablo, de nueve y tres años de edad, respectivamente.

Fuentes de la cancillería argentina consultadas por la AFP dijeron no estar en condiciones de confirmar si Molina se encuentra en la legación diplomática en la Isla.

Una fuente de la presidencia dijo que se había tomado la decisión de no formular declaraciones sobre el tema por el momento.

"Estamos desesperados" declaró Verónica Scarpatti, nuera de Molina, quien dijo desconocer el paradero de su suegra y volvió a pedir al gobierno de Néstor Kirchner "que no abandone" el reclamo de la mujer para viajar a Argentina.

Según La Nación, Molina habría ingresado en la mañana del martes junto a su madre, Hilda Morejón, de 84 años y delicado estado de salud, a la representación diplomática de Buenos Aires, con la intención de pedir asilo político.

Por esa razón, la cancillería argentina dispuso que el embajador Raúl Taleb adelantara su retorno a la Isla. El diplomático había sido llamado a consultas.

A principios de diciembre, el presidente argentino envió una carta a Fidel Castro para solicitarle que permitiera a la neurocirujana salir de la Isla rumbo a Buenos Aires.

Castro respondió sugiriendo que fuera la familia de la doctora la que viajara a La Habana.

El hijo y la nuera de Molina rechazaron este miércoles la propuesta.

"Es increíble, es muy difícil de explicar a nuestros hijos. Esto no es lo que pedimos y por lo que venimos luchando hace diez años", dijo Verónica Scarpatti, en declaraciones a la emisora argentina Radio 10.