Organizaciones de exiliados cubanos han pedido a la Unión Europea (UE) que explique la forma en que mantendrá los contactos con la disidencia interna, después de que los expertos de los Veinticinco para América Latina recomendaran esta semana suavizar las sanciones de 2003.

En Miami, el Directorio Democrático Cubano opinó que "las excarcelaciones temporales, mediante licencias extrapenales, otorgadas a un pequeño grupo de presos políticos cubanos, no ameritan una revisión de la actual política europea hacia Cuba".

No obstante, saludó la recomendación dada por los expertos de la UE para que los contactos con la oposición cubana "pasen a una fase 'oficial y estructurada', y de que todo contacto de alto nivel entre la UE y el régimen castrista vaya conjuntamente con un contacto del mismo nivel y simultáneo con los líderes opositores cubanos".

"Entendemos que estas recomendaciones, de aplicarse, se transformarían en un reconocimiento oficial por parte de la UE a la representatividad del movimiento opositor cubano", dijo la organización en un comunicado.

Los cancilleres de los Veinticinco deberán decidir en enero sobre la propuesta de los expertos, que recomienda suavizar las sanciones diplomáticas adoptadas en 2003 para protestar por el encarcelamiento de 75 disidentes.

Esas medidas incluyeron la invitación de disidentes a las celebraciones de fechas nacionales en las embajadas europeas en la Isla y la limitación de los contactos de alto nivel.

La Habana respondió con obstáculos a las relaciones de los diplomáticos europeos con los ministerios y funcionarios en La Isla.

Los expertos aconsejaron este martes eliminar temporalmente las invitaciones a los disidentes y no invitar tampoco a los funcionarios del gobierno a las fiestas de las embajadas. Además, abogaron por el reinicio de las visitas de alto nivel y los contactos culturales, aunque incluyendo siempre en la agenda la "cuestión de los derechos humanos" y encuentros con representantes de la oposición.