Los Quince han comenzado a reducir sus contactos diplomáticos y sus intercambios bilaterales con La Habana, como forma de expresar su desacuerdo con el encarcelamiento de 75 opositores pacíficos de la Isla, sentenciados a penas de hasta 28 años de cárcel.
Según informó la Reuters, varios gobiernos de la Unión Europea (UE) han cancelado visitas oficiales a Cuba o reducido el nivel de las delegaciones que viajan a la Isla.
Un diplomático europeo dijo que hay conversaciones entre los Quince para dejar claro a La Habana "que las cosas no son como antes". En Bruselas, "se está hablando de suspender los contactos de alto nivel", afirmó.
El gobierno holandés retiró a un funcionario de alto nivel de una misión comercial que viajó a La Habana hace tres semanas.
Por su parte, Alemania canceló una visita de cooperación. Lo mismo hizo el presidente de la región italiana de Campania, quien suspendió su viaje a la Isla. Mientras España retiró la semana pasada su habitual participación en el festival cultural La huella de España, que se celebrará del 27 de abril al 4 de mayo próximos en Cuba. Otros gobiernos europeos estudian medidas similares.
Un hecho significativo ocurrió el pasado martes en una recepción que ofreció el embajador del Reino Unido en La Habana, Paul Hare. Por primera vez. los diplomáticos británicos invitaron a algunos de los líderes disidentes que no han sido encarcelados, entre ellos estaban Elizardo Sánchez Santacruz y Vladimiro Roca, y a las esposas de varios de los opositores presos, informó el diario El País. A la recepción también asistieron funcionarios cubanos.
"Estamos muy preocupados por los encarcelamientos y estamos reexaminando nuestras actividades bilaterales, incluidas las visitas oficiales", dijo un diplomático británico citado por Reuters.
La Comisión Europea ha advertido que la represión contra la oposición pacífica de la Isla "afectará a las relaciones entre la UE y Cuba y a las perspectivas de una mayor cooperación".
El gobierno cubano solicitó en enero pasado su adhesión al acuerdo de Cotonou, entre la UE y 77 países del grupo África, Caribe y Pacífico (ACP). Ese convenio permite a sus signatarios disfrutar de un régimen de preferencia comercial con los Quince.
En lo que parece ser un intento de adelantarse al rechazo, La Habana anunció este mes que está "considerando seriamente" la posibilidad de retirar su solicitud de ingreso a Cotonou.
"Algunos en la UE conciben ilusoriamente la entrada de Cuba en Cotonou como un mecanismo para presionarla e imponerle condicionamientos políticos", dijo el viernes pasado el canciller cubano Felipe Pérez Roque. "A Cuba no se le puede presionar", agregó.
La Unión Europea es el principal inversor, socio comercial y donante de ayuda de Cuba, y ha mantenido abiertos sus canales de diálogo y cooperación con el gobierno de Fidel Castro, al cual ha tratado de convencer sobre la necesidad de emprender reformas políticas y económicas. |