La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) responsabilizó el sábado a las autoridades cubanas por el deterioro de la salud del disidente Víctor Rolando Arroyo, en huelga de hambre en la Prisión Provincial de Guantánamo, informó la AP.
Arroyo, condenado a 26 años de cárcel en abril de 2003, inició hace más de 15 días su huelga, en protesta por el maltrato de las autoridades penitenciarias, en especial de un oficial identificado como "el capitán Armesto".
"Responsabilizamos a las autoridades cubanas por la integridad física de Arroyo. Lamentamos que además de condenar por más de dos décadas a un periodista por el delito de escribir, los carceleros sumen el maltrato a la injusta sanción del gobierno", expresó en un comunicado Gonzalo Marroquín, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información.
Arroyo, de 53 años, es uno de los 75 disidentes que el gobierno cubano envió a prisión en la primavera de 2003. En el momento de su arresto dirigía la Unión de Periodistas y Escritores Cubanos Independientes (UPECI). Unos 24 periodistas cumplen condenas en las cárceles de la Isla.
El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés), con sede en Nueva York, dijo este fin de semana estar "sumamente preocupado" por el estado de salud de Arroyo, quien se encuentra en el hospital de la prisión.
"Estamos sumamente preocupados por la salud de nuestro colega", sostuvo la directora ejecutiva del CPJ, Ann Cooper. "Reiteramos nuestras demandas al gobierno cubano de que libere a los 24 periodistas presos, sin condiciones".
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