Una visión total

Interactivo, que sirve como grupo base y en torno al cual gira el disco, cuando aparece en solitario con su vocalista, Francis, da la nota oscura de este proyecto, sobre todo en sus textos, que no dejan de ser esencialmente tópicos y reiterativos de toda la música popular cubana hecha con anterioridad. Por ejemplo, en la pieza que abre el álbum, Sentimiento, se repite infinitamente la frase "no hay sentimiento sin clave y clave sin sentimiento".

Esto contrasta, en cambio, con los arreglos musicales, que conjugan con acierto el funk-rock con la síncopa del son y la timba cubana. Tampoco se debe pasar por alto la excelente voz sonera de Francis. Pero para escribir esta pieza y Girasoles los autores debieron repasar antes algunos temas de Pavel Urquiza, Vanito, Medina y Athanai.

El dúo de Vivanco y Telmary en Montuno se mueve en un montuno rapeado notable, que hace desplegar toda la capacidad de improvisación de la cantante. Por su parte, Haydeé Milanés pone todo de sí misma en un excelente bolero de Decemer Bueno, Siempre que te vas, siendo este, junto con Libre, las mejores piezas de este género en el CD. Con la diferencia de que en el segundo Telmary improvisa sobre una base de bolero, lo que da un nuevo ángulo armonioso al bolero tradicional y rinde homenaje a las grandes boleristas capaces de improvisar dentro de esta estructura normalmente cerrada. Sin embargo, las grandes, como Elena Burke, sabían abrirlas rompiendo esquemas más allá de la capacidad del compás.

Telmary es la gran revelación de esta producción. Comenzó siendo vocalista de rap del grupo Free Hole Negro, pero en este nuevo proyecto ha empezado a salir de este género para saltar del montuno al bolero, del bolero al rap, y de este al más crudo funk-reggae, convirtiéndose en el hilo conductor de las diecinueve piezas del trabajo. Además, es quien da el clímax más alto en el tema Nosotros los revolucionarios, la única pieza crítica con la sociedad cubana actual, realizada con una mirada profunda de los problemas que unen y separan en un exilio forzoso. Eso sí, sin señalar nunca a un culpable directo, aunque los aplausos sacados de cualquier discurso multitudinario sacan a la luz al verdadero culpable.

Obsesión es el grupo de rap que fue escogido para representar esta tendencia en su versión local de este ritmo en la Isla. De las dos piezas que muestran es un verdadero impacto agradable Te equivocas, donde la base del rap sobre el que improvisan se sostiene sólo de una guitarra y chasquillos de dedos, una tendencia explotada por Lauren Hill, pero desconocida en la mayoría de los grupos de la Isla.

Te equivocas se mueve diligentemente entre el soul y el rap con rima cubana, dejando entrar un poco de aire fresco a la manera cansina en que se mueven casi todos los raperos cubanos que hacen sus bases sobre son cubano, un estilo que marcó el grupo Orishas hace seis años.

Para finalizar, se debe señalar la notable idea de incluir a Candyman, un exponente del reguetón cubano que da un giro inesperado a la visión sonora del mismo y polariza su discurso hacía sitios donde otras antologías no habían llegado. Su canción Chinito, de carácter erótico festivo, es excelentemente divertida.

Sólo se hecha en falta un mejor diseño de Cuba 21, y la ausencia de un exponente de la timba. Podría haber estado Michel, ex vocal de la Charanga Habanera, que también acaba de sacar su primer CD, para terminar de ofrecer una visión total de lo que está pasando en la Isla.