Por todo lo alto comenzaron Ariel Prieto y Adrián Duquecito Hernández la temporada invernal de béisbol, en México y Venezuela respectivamente; en tanto Yobal Dueñas lució discreto en la Liga de Arizona para Novatos.
Prieto ganó cinco juegos sin derrotas para los Yaquis de Obregón en el primer mes de contienda. Con sus éxitos, la novena suma 15 victorias y 9 derrotas, empatada en el lugar de honor con Tomateros de Culiacán.
Por su parte, Duquecito Hernández, quien registró una pésima contienda en la Liga Norteamericana de Triple A, juega para los Cardenales de Lara y compiló en los primeros juegos cuatro triunfos, un solo revés, y tras una blanqueada a costa de los Navegantes de Magallanes, bajó su promedio de efectividad a 385.
Dueñas, que pertenece a la organización de los Yankees, debutó en la Liga adonde van a parar los jóvenes que son promesas y aparentemente tienen todas las facultades necesarias para escalar el Big Show. No obstante sus 32 años cumplidos, 10 más que el resto de los participantes, el vueltabajero se desenvolvió moderadamente en las oportunidades que le brindaron. Bateó para 323 con 10 hits en 31 oportunidades, en sólo 10 de los 39 programas del equipo Gran Canyon Rafters. El resto de los partidos los compartió con los también segundas bases Aaron Herr y Ryan Raburn, que por suerte batearon 186 y 196, respectivamente.
¿El camino de la gloria?
Prieto y Hernández, ambos tiradores, dejaron atrás la pelota cubana, donde rindieron buenas faenas. Pero en el béisbol rentado no han logrado estabilizarse, por motivos distintos. El primero, que llegó hasta las Ligas Mayores con el Oakland, ha tenido dificultades con su brazo de lanzar, y Hernández, que estuvo con los Yankees, no ha podido imponerse ante el fuerte bateo que impera en el profesionalismo.
A propósito de este último, que fue bautizado por la afición cubana con el sobrenombre de Duquecito por su parecido en los movimientos con El Duque Hernández, ha sido rebautizado en predios morochos con el remoquete de "La Perla Negra", ya que de la noche a la mañana se ha convertido en el primer pitcher de los Cardenales.
Si Ariel Prieto y Adrián Hernández logran estabilizarse en México y Venezuela, seguirían el camino de otros tiradores cubanos que mucha gloria tuvieron hace más de 50 años.
Lázaro Salazar, Martín Dihigo y Ramón Bragaña fueron verdaderas luminarias en el firmamento azteca. Cocaína García, primero, y tiempo después Diego Seguí, encabezaron en Venezuela a numerosos jugadores cubanos que fueron adorados por el público de este país. |
