Un atentado suicida con coche bomba destrozó el miércoles la base de la policía militar italiana en la localidad iraquí de Nassiriya y provocó la muerte de 32 personas.

Este ha sido el más cruento ataque contra un aliado estadounidense desde el inicio de la ocupación de Irak, informó AP. El número de bajas italianas es el mayor que haya tenido ese país desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.

El ministro de la Defensa de Italia, Antonio Martino, culpó del atentado a elementos leales a Sadam Husein y a miembros del grupo terrorista Al-Qaeda.

El hecho ha llevado a los responsables de otras naciones a tomar precauciones. Portugal envió a Basra a 128 policías de elite originalmente asignados a Nassiriya. Un vocero del gobierno japonés indicó que Tokio pospondrá, por su parte, el envío de tropas a Irak hasta el próximo año.

Sin embargo, el mayor general británico Graeme Lamb, comandante de la división multinacional del sureste del país, insistió el jueves en que la coalición "no desistirá" ante el ataque.

Indicó que hay informaciones confusas sobre el atentado debido a que "toda la gente que fue testigo, que estuvo cerca del lugar de los hechos, está muerta ahora". Sin embargo, dijo que "esto tiene todos los ingredientes de un decidido ataque suicida".

Italia tiene "información muy confiable de espionaje" que señala que el Fedayín Sadam, la fuerza paramilitar del depuesto dictador, es responsable del acto, junto con un "grupo reagrupado de terroristas de Al-Qaeda", dijo.

La explosión de Nassiriya arrancó la parte delantera del edificio de concreto ubicado en la orilla del río Eufrates, incendió varios autos y provocó una gran columna de humo negro, según Reuters.

"Un camión se estrelló en la entrada de la unidad de la policía militar, seguido de cerca por un auto, que detonó", dijo un portavoz de la fuerza multinacional encabezada por soldados británicos en el sur de Irak.

La onda expansiva destrozó ventanas a cientos de metros de distancia. Varias casas vecinas a la base resultaron dañadas y decenas de iraquíes heridos fueron llevados a los hospitales.

Cerca de 2.300 efectivos italianos están en el sur de Irak, muchos radicados en Nassiriya, en las riberas del Eufrates, zona que ha estado en relativa calma desde la guerra.

Las fuerzas italianas y rumanas que se encuentran en la ciudad, integran el contingente encabezado por Gran Bretaña y han sido generalmente bien recibidas por los residentes locales.

El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, dijo que su país no sería intimidado por el atentado.

"No seremos intimidados y nadie puede apartarnos de nuestro compromiso de ayudar a ese país a levantarse de nuevo y a reconstruirse para autogobernarse y darse libertad y seguridad", dijo Berlusconi en un comunicado.

Las muertes del miércoles fueron las primeras en un ataque contra integrantes no británicos de la fuerza multinacional que opera en el sur de Irak.