En su primera conferencia de prensa desde que llegó exiliado a la República Centroafricana, Jean-Bertrand Aristide insistió el lunes en que sigue siendo presidente de Haití y llamó a sus seguidores a la "resistencia pacífica" contra lo que describió como la "ocupación" de su país, informó AP.

"Soy el presidente democráticamente electo y lo sigo siendo. Pido que la democracia sea restablecida en Haití", dijo Aristide a periodistas en Bangui. "Convocamos a la resistencia pacífica", añadió.

El derrocado presidente dijo que los rebeldes haitianos que lo desalojaron del poder eran "terroristas y narcotraficantes". También reiteró las denuncias de que Estados Unidos lo obligó a abandonar el poder. Washington niega esas acusaciones.

"Fue de hecho un secuestro político. Ese secuestro político, lamentablemente, abrió el camino a la ocupación", señaló el ex gobernante.

Aristide dijo que fue sacado del poder "no sólo por la fuerza, sino mediante el uso de mentiras. Ellos me pusieron en un automóvil y aparecí en el aeropuerto" de Puerto Príncipe. "El aeropuerto estaba bajo control de los estadounidenses".

Interrogado sobre sus planes, se mostró ambiguo. "Donde iré depende de las circunstancias. Por el momento, estoy aquí, y estoy muy bien", indicó.

Seis muertos durante marchas contra Aristide en Haití

Supuestos partidarios del derrocado presidente dispararon el domingo contra miles de haitianos que celebraban la destitución del ex mandatario, dejando seis muertos, entre ellos un periodista español de televisión, y 18 heridos, informó Reuters.

Testigos dijeron que pistoleros, presuntamente ligados al movimiento Lavalas de Aristide, dispararon desde los techos e irrumpieron en la principal plaza de la capital del país, en las inmediaciones del Palacio Nacional, en una camioneta y a pie, abriendo fuego contra la multitud.

Este ha sido el peor ataque desde que Aristide dejó el país. Funcionarios de un hospital precisaron que una de las víctimas fatales fue Ricardo Ortega, corresponsal del canal de televisión español Antena 3. Entre los heridos se encuentran dos policías haitianos y el periodista estadounidense Michael Laughlin, del periódico South Florida Sun-Sentinel, quien recibió heridas en la cara y en un hombro.

Testigos dijeron que los periodistas resultaron heridos durante un tiroteo entre la policía haitiana y partidarios de Aristide.

Marines de Estados Unidos a bordo de Humvees equipados con ametralladoras, que lideran una fuerza multinacional aprobada por la ONU para restaurar el orden en el empobrecido país, llegaron a la escena, mientras cientos de manifestantes corrían para escapar del tiroteo.

"Fue una masacre", dijo el jefe de la policía haitiana, Leonce Charles, que asumió su cargo hace apenas una semana.

El primer ministro Yvon Neptune instó a la policía a encontrar a los "asesinos" independientemente de su filiación política.

"Pido a todas las partes que acaben con las manifestaciones hasta que tengamos un nuevo primer ministro y un nuevo gobierno y podamos lidiar con la seguridad en el país", declaró Neptune en una conferencia de prensa.

Miles de haitianos habían salido a la calle gritando "queremos justicia", durante las celebraciones por la destitución de Aristide.

"¡Aristide criminal! ¡Prisión para Aristide!", coreaban, agitando banderas haitianas, cantando, aplaudiendo, dando puñetazos en el aire y tocando las bocinas de autos y camiones.