www.cubaencuentro.com Lunes, 28 de abril de 2003

 
  Parte 1/2
 
El fusilamiento no es la solución
Se impone abandonar el principio de que 'aquí nada cambia mientras el enemigo no cambie' promoviendo los derechos humanos y el respeto a la diferencia.
por DIMAS CASTELLANOS, La Habana
 

En las últimas semanas se vienen produciendo en Cuba, de forma creciente y alarmante, intentos de desvíos de naves aéreas y marítimas que evocan la víspera de los conocidos éxodos masivos. Uno de los más recientes culminó trágicamente con el fusilamiento de tres jóvenes que infructuosamente raptaron una lancha cargada de
El bote
El bote (Sandra Ramos).
tripulantes en la bahía habanera, para huir hacia los Estados Unidos. Esta tragedia ha conmocionado a los nacionales y provocado una ola de protestas en diferentes partes del mundo.

Una enseñanza valiosa, si no la más valiosa de la historia de la humanidad, es la convicción de que la violencia sólo genera violencia. El hecho irresponsable de poner en peligro la vida de otras personas para escapar del país, como hicieron los tres jóvenes fusilados, no se castiga privándolos de la vida, que constituye el primer derecho humano. Esa respuesta, además de constituir un retroceso respecto a la antiquísima y superada ley del talión que reclamaba la "equidad" con la máxima de ojo por ojo y diente por diente, carece de toda efectividad al no atacar las causas del mal.

El creciente y prolongado éxodo de cubanos se remonta al exilio de batistianos y expropiados por la revolución en 1959; tuvo sus momentos pico en la Operación Peter Pan (1960), Camarioca (1965), Mariel (1980) y la Base Naval de Guantánamo (1994). Hechos que se intercalan con otros no menos desgarradores, como el hundimiento del remolcador 13 de Marzo, el famoso naufragio donde perecieron 11 cubanos, la muerte de la madre del famoso niño Elián González o la de dos jóvenes al intentar escapar en el tren de aterrizaje de un avión de la British Airways.

Si la emigración es un añejo y permanente fenómeno social, las salidas masivas responden a situaciones concretas de crisis, que una vez superadas permiten a los emigrados regresar a sus hogares de origen. En Cuba, sin embargo, se trata de salidas permanentes, masivas o aisladas, que han ocurrido antes y después del embargo, antes y después de la Ley de Ajuste, y antes y después de la "Batalla de Ideas"; que han involucrado desde expropiados hasta los nacionales más sencillos, desde los más pálidos hasta los más oscuros de piel, desde ancianos hasta niños de ambos sexos.

1. Inicio
2. La prolongada...
   
 
EnviarImprimir
 
 
En Esta Sección
¿Guerra de párrafos?
ALCIBíADES HIDALGO, Washington
Sanciones en la balanza
IVETTE LEYVA MARTíNEZ, Miami
Otra derrota diplomática
MARY SIMóN, Ginebra
Editoriales
Sociedad
Represión en Cuba
Cultura
Internacional
Deporte
Opinión
Desde
Entrevista
Buscador
Cartas
Convocatorias
Humor
Enlaces
Prensa
Documentos De Consulta
Ediciones
 
Nosotros Contacto Derechos Subir