Amnistía Internacional (AI) ha incluido en su lista de prisioneros de conciencia cubanos a otros cuatro disidentes arrestados en marzo de 2003. Tres de ellos aún no han sido llevados a juicio.

Los cuatro opositores son Rolando Jiménez Posada, Rafael Millet Leyva, Miguel Sigler Amaya y Orlando Zapata Tamayo.

Estos disidentes "fueron detenidos y dos de ellos acusados formalmente sólo por participar en actividades pacíficas. Además, resulta especialmente preocupante que, en algunos casos, los detenidos permanecen encarcelados casi un año más tarde sin que se hayan presentado cargos formales contra ellos", según un informe de la organización publicado este jueves.

AI ha reconocido como prisioneros de conciencia a los 75 disidentes condenados a penas de hasta 28 años de cárcel en abril pasado. La organización recordó que "las autoridades cubanas han justificado su actuación contra los juzgados en abril del año pasado, alegando su necesidad de defenderse contra las provocaciones y amenazas de Estados Unidos a su seguridad nacional".

"Si bien Amnistía Internacional cree que nada justifica el encarcelamiento de presos de conciencia u otras violaciones de derechos fundamentales, y continúa condenando a Cuba por estas violaciones (…), también reconoce el efecto negativo del embargo estadounidense sobre todos los derechos humanos en Cuba, y por tanto pide a Estados Unidos que revise su política", dijo un comunicado de prensa de la organización.

AI instó una vez más a las autoridades cubanas "a que dejen inmediatamente en libertad incondicional a todos los presos de conciencia y pongan fin a todas las formas de hostigamiento e intimidación contra los disidentes".

Rolando Jiménez Posada, de 33 años, fue detenido el 25 de abril de 2003 y aún no se han presentado formalmente cargos en su contra. Es abogado y director del Centro Democrático Pinero de Derechos Humanos, en Isla de Pinos. En enero de 2002 fue despedido de su puesto como asesor jurídico de una empresa de medicina veterinaria debido a sus problemas con el Departamento de Seguridad del Estado (DSE), según los informes recibidos por AI. En el momento de su arresto le incautaron una lista de direcciones de grupos del exilio.

Las autoridades tampoco han presentado cargos contra Rafael Millet Leyva, detenido el 21 de marzo de 2003.

Millet Leyva, de 33 años, es presidente del Movimiento de Resistencia Cívica Martin Luther King, en Isla de Pinos.

En su domicilio, los agentes confiscaron libros y documentos, entre ellos la Declaración Universal de Derechos Humanos. Extraoficialmente, se informó de que estaba acusado de "propaganda enemiga" y "desacato" por escribir consignas contra el gobierno en edificios públicos de Nueva Gerona, junto a Rolando Jiménez Posada.

El disidente se encuentra recluido en la prisión de Guayabo, en Isla de Pinos. Su juicio debía haberse celebrado en diciembre de 2003, pero según las informaciones de que dispone AI, aún no ha sido juzgado.

Miguel Sigler Amaya fue detenido el 18 de marzo de 2003 y condenado a 26 meses de prisión por "desobediencia" y "resistencia". Es director del Movimiento Independiente Opción Alternativa, en Pedro Betancourt, Matanzas.

En marzo de 2003 el Tribunal de Jovellanos le condenó a seis meses de prisión. En abril fue juzgado por el Tribunal Popular Municipal de Pedro Betancourt y condenado a 20 meses por delitos de "desobediencia" y "resistencia", que presuntamente cometió en el momento de su detención. "Al parecer está en espera de su tercer juicio, en el que el fiscal pedirá una condena de 15 a 25 años de prisión, aunque aún se desconocen los delitos de los que se le acusa", dijo AI.

Sigler Amaya está recluido en la prisión de Agüica, en la provincia de Matanzas, desde donde ha denunciado constantes amenazas de las autoridades de la prisión y hostigamiento por parte de los presos comunes. Padece diabetes y afecciones respiratorias.

Amnistía Internacional considera presos de conciencia a sus dos hermanos, Guido y Ariel, quienes cumplen 20 años de cárcel.

Orlando Zapata Tamayo, arrestado el 20 de marzo de 2003, ha sido acusado de "desacato", "desórdenes públicos" y "desobediencia", pero aún no ha sido llevado a juicio.

Es miembro del Movimiento Alternativa Republicana y del Consejo Nacional de Resistencia Cívica.

En el momento de su arresto participaba en una huelga de hambre en la Fundación Jesús Yánez Pelletier, en La Habana, para pedir la liberación de Oscar Elías Biscet y otros presos políticos. Los informes citados por AI dicen que el fiscal pedirá una condena de tres años de prisión.

Amnistía Internacional ha pedido a La Habana que, hasta tanto estos cuatro prisioneros sean liberados, les garantice "acceso a atención médica, y que las condiciones de reclusión en que se encuentran cumplan las normas internacionales".

Además, ha exigido al gobierno cubano que ponga fin "de forma inmediata a todas las formas de hostigamiento e intimidación dirigidas contra disidentes que sólo pretenden ejercer de manera legítima sus derechos humanos fundamentales".