AFP/ La Habana. Esposas y madres de varios de los 75 disidentes presos desde la primavera del 2003, conocidas como las Damas de Blanco, realizaron este martes una vigilia para pedir a la Virgen de la Caridad del Cobre, Patrona Nacional, la libertad de sus familiares, constató la AFP en el lugar.

"Estamos aquí para pedir a la Caridad del Cobre la libertad y sólo la libertad de nuestros familiares", dijo Blanca Reyes, esposa del poeta y periodista Raúl Rivero, condenado a 20 años de cárcel.

Reunidas en casa de Rivero, en el municipio de Centro Habana, una veintena de mujeres vestidas de blanco encendió velas y dedicó rogatorios a la imagen de la Caridad del Cobre, cuyo día la Iglesia Católica conmemora este miércoles.

"Nosotras, mujeres cubanas, esta noche rogamos a la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona de Cuba, para que ilumine la senda de la justicia y recobren la libertad los prisioneros de conciencia detenidos luego de la asonada represiva del marzo de 2003, así como todos los prisioneros políticos de Cuba", indicó un documento suscrito por las presentes.

"Por pretender ejercer su derecho a la libre expresión y amar a nuestra Patria, los 75 fueron condenados a penas de hasta 28 años de cárcel", recordaron las mujeres en el texto.

Esos prisioneros, "son sometidos a un 'régimen de máxima severidad especial', que incluye gran crueldad hacia las familias. La salud de ellos se deteriora y muchos tienen serios padecimientos, sin que reciban atención médica adecuada", agregaron.

Además de Reyes, estaban presentes Miriam Leiva, esposa de Oscar Espinosa Chepe (condenado a 20 años); Gisela Delgado, esposa de Héctor Palacios (25 años); Elsa Morejón, esposa del médico Oscar Elías Biscet (25 años); Gisela Sánchez, esposa de Antonio Díaz Sánchez (20 años), entre otras.

La Caridad del Cobre, representada en la iconografía como una virgen mulata, era llevada como salvaguarda por los independentistas cubanos (mambises) en la guerra contra la corona española, en el siglo XIX.

"La virgen que guió a los mambises, escuchará nuestros ruegos. Estamos seguras", dijeron las esposas y familiares de los presos políticos cubanos.