Cartas
www.cubaencuentro.com Lunes, 24 de marzo de 2003 www.cubaencuentro.com

Encuentro en la Red agradece los comentarios, inquietudes y críticas de sus lectores. Las cartas no deberán exceder las 200 palabras e incluirán el nombre y la ciudad del remitente. La redacción se reserva el derecho de editar o resumir los textos.

Existen momentos en los cuales los sentimientos de rabia e impotencia casi no nos permiten escribir algunas letras, aunque ése sea el oficio. La noticia de que había sido detenido en La Habana el poeta, escritor y connotado periodista independiente Raúl Rivero, es una muestra de que el régimen se ha lanzado a una ola represiva sin precedentes. Se quitaron la careta, se puede decir en puro cubano. Las crónicas que Raúl escribía en estas páginas (y que algún día deben ser recogidas en un libro) tenían el fino humor del sarcasmo, corrosivo sin necesidad de adjetivos.

Tal parece que en La Habana los grandes acontecimientos se producen cuando la atención mundial está virada hacia otros asuntos. Durante la primera guerra del Golfo, murió de "un infarto" el ex ministro de Interior, General José Abrantes, sin duda alguna la pieza clave para demostrar que el narcotráfico estaba bajo la responsabilidad del alto mando y no eran actividades que realizaban por la libre los que fueron fusilados. Ahora se aprovecha de nuevo el ataque contra Irak para desatar internamente una ola represiva brutal, muestra de que las iniciativas de la oposición interna cada vez son más peligrosas para un sistema que se vanagloriade que se basa en el apoyo de "la amplia" mayoría del pueblo. ¡Grande debe ser el descontento de ese pueblo cuando se trata de intimidar a todos con las detenciones de los opositores más conocidos en el mundo!

Conozco a Rivero desde hace cerca de 40 años. Comenzamos la carrera periodística juntos en el diario Juventud Rebelde. El historiador Moreno Fraginals nos confundía de tal forma que cuando yo estaba de corresponsal de Prensa Latina en Vietnam, le decía a Raulito que leía sus crónicas y que era una pena que ahora no pudiera dedicarse a escribir poemas. De pronto, le comentaba:

—Bueno, estás en Vietnam, pero te veo a menudo en La Habana.
Raúl, con ese humor característico, le respondía:
—¿Sabe Moreno? Es que me llaman a cada rato para consultas.

Hacía estallar las carcajadas de todos cuando contaba aquella anécdota. Es duro imaginarlo ahora, en una celda de Villa Marista o de cualquier otra dependencia represiva de la Seguridad del Estado, meciéndose el cabello con su dedo índice y respondiendo a los interrogatorios. Pienso que tenía el presentimiento de que algún día él también podría ser detenido. Tengo la confianza de que está preparado para eso. El hecho de que hayan penetrado en su casa de madrugada, ante la mirada atónita de su mamá Hortensia, de 83 años, es una muestra de la estudiada crueldad del régimen.

Estas detenciones deben hacer reflexionar a los tibios y cómplices por omisión, que todavía simpatizan con el régimen de Fidel Castro. Ya James Carter dijo, días atrás, que estaba "decepcionado" ante la respuesta del régimen a sus propuestas para propiciar un diálogo civilizado en Cuba, entre las autoridades y la oposición. Carter ahora sabrá que la mayoría de las personas con las que se entrevistó están ya en las cárceles del régimen, y la espada de Damocles pende sobre sus cabezas: pueden ser condenadas hasta a 20 años de prisión por "colaborar" con el enemigo.

¿Qué más tendrá que suceder para que los Saramago y compañía reaccionen ante las duras realidades que vive el pueblo cubano? ¿Hasta cuándo la ceguera?

Miguel Rivero

EnviarImprimir

Acabo de leer Pequeñas nostalgias del castrismo, y me parece una nota pintoresca y refrescante en medio del momento tan desagradable que vivimos entre la guerra en Irak y la ola represiva en Cuba. Me parece desacertado el título del artículo pues la nostalgia no es del castrismo (¡solavaya!) sino de nuestro país, de nuestra cultura, de nuestro humor, nuestra gente. Decir que eso es "castrismo" es hacernos muy poco favor y darle a ese régimen una dimensión que no tiene y que no merece.

A la espera de Vampiros en La Habana (II).

Rosy Pérez

EnviarImprimir

Para nada considero la nostalgia que tenemos relacionada al "castrismo". El título Pequeñas nostalgias del castrismo, del artículo de Ivette Leyva, no pudo estar más equivocado. Se disfruta mucho, muchísimo, cualquier película cubana que podemos encontrar de nuevo aquí en Miami. Se vuelve a recordar nuestra tierra, nuestra gente, lo que vivíamos y sentíamos cuando por primera vez las vimos a 90 millas hoy de distancia. Y vuelvo a mirar esos "muñequitos" rusos y cubanos, y vuelvo a reírme con la misma ingenuidad de cuando era niña y los veía. Y es verdad que los rusos eran un "castigo", pero de hasta eso tenemos chistes hoy día y nos reímos, y los disfrutamos más. No tiene nada que ver con Castro, con el "castrismo". Qué manía de unirlo y relacionarlo todo a un sistema, a un hombre o a un nombre. Grandes nostalgias de Cuba hubiera sido, sin dudas, un nombre mucho más acertado. Y gracias a todos esos sitios que hay en esta ciudad que nos permiten curarnos de alguna forma.

Ariadna García

EnviarImprimir

Felicitaciones por al artículo El Paso del Cangrejo, sobre ese sector —gracias a Dios cada vez más debilitado— del anticastrismo rancio de Miami, que no hace otra cosa que hacerle el juego al régimen de La Habana. Enemigos demasiado previsibles, ya es hora de que se den cuenta de lo dañino de su posición, comprensible, sin duda, pero obsoleta. El considerarlos de "línea dura" es un lugar tan común como el de hoy en día las calificaciones de "izquierdas" o de "derechas" en el mundo. ¿De línea dura por ser intransigentes? No, la línea dura es la que está haciendo oposición en La Habana, y también, desde el exilio, la capaz de apoyar a los movimientos de oposición interna, la capaz de ver los puntos flacos del régimen cubano, y no la de bailar a su son, siempre con respuestas del mismo tipo, inocuas y desastrosas de cara a la comunidad internacional.

Muchas gracias,
I.L. Santos, Italia.

EnviarImprimir

Me acerco a Encuentro en la Red por vez primera y me anima el apreciar el tratamiento de los problemas de nuestra Cuba desde ángulos que nos dignifican como pueblo, con una cultura que puede preciarse de estar a la vanguardia del pensamiento social, no sólo en el ámbito latinoamericano sino, de seguro, a escala mundial. Agradecería infinitamente que el diario dedicara una serie de artículos (merecería una sección fija) al pensamiento pedagógico cubano, creo que es uno de los bastiones de nuestra cultura. Podría resultar de gran interés que ampliara la información que ha brindado sobre el salón de la fama del deporte cubano. Desde ahora propongo que en una próxima selección sea considerado Miguel Ángel Moenck.

Atentamente,
Carlos García

EnviarImprimir

Acabo de leer el artículo La duda de George, de Jorge Ebro, y coincido en que Contreras está pasando por un momento de grandes cambios, donde debe "aprender a lanzar" prácticamente para entrar en este nuevo mundo, muy distinto a donde él había pasado su carrera; que es muy probable que comience la temporada en la AAA y hasta esto le puede ser muy conveniente; y que finalmente deberá imponerse en la Gran Carpa. Solamente no estoy de acuerdo en que Shea Hillebrand, quien acaba de terminar su temporada de Novato en las Grandes Ligas, pueda catalogarse como "uno de los más experimentados bateadores de Boston".

Sin más,
Raúl Ávila

EnviarImprimir

No debería ser tema la controversia de si se apoya o no el Proyecto Varela. El PV depende de que el régimen de Castro-Cuba cambie de opinión y llame a un referendo basado en los postulados que propuso Oswaldo Payá. Este referendo es muy improbable que se lleve a cabo en Castro-Cuba. El PV o cualquier otro que salga desde adentro o fuera de Cuba, o en conjunto, no puede depender de la voluntad democrática del tirano, sino por el contrario, depender de la movilización coordinada de la población a través de los diferentes proyectos hacia un cambio democrático. Entre ellos el Proyecto Varela del MCL, pero también el Proyecto Nacional de Todos Unidos, la consulta popular (35.209 votantes) de la Mesa de Reflexión (MROM), el Proyecto para la creación de una Sociedad Civil de la Asamblea, etc. Insistir en que toda la oposición se incorpore a un solo proyecto no es factible, ni democrático. Pero el acercamiento entre Todos Unidos y la Asamblea (al solidarizarse en sus actividades de apoyo a la campaña de liberación del Dr. Biscet, monitorear las "elecciones" de Castro-Cuba...) es un paso en la dirección correcta. También el acercamiento de los líderes de la Asamblea con los de la MROM, el apoyo de Todos Unidos al Proyecto Varela, como proyecto pero no como el único, es una decisión política acertada. Es en la convergencia y coordinación de las fuerzas democráticas (no en la controversia sectaria) donde reside la mayor posibilidad de triunfar en la remoción del totalitarismo y la institucionalización de la libertad y la democracia en la nación cubana.

Eduardo Pérez Bengochea

Referencias
La Carta Ciudadana en Ginebra
EnviarImprimir

Con motivo del artículo Llegó el que venía llegando, de Enrique Collazo, sobre la primera visita a territorio español de Willy Chirino,¡ ojo con las fechas !, pues ni se trata del primer concierto en España, ni siquiera el segundo. El primero sucedió en Tenerife, creo que en la playa de Los Cristianos, hace aproximadamente un año y algo, en un evento de música salsa y latina en general; el segundo fue el sábado 1 de marzo de este año en el parque Sta Catalina de Las Palmas de Gran Canaria, durante los carnavales, de hecho fue el domingo día 2 de marzo al amanecer. ¿Es acaso que los territorios ultra periféricos de España no son España a los efectos de los espectáculos? ¿Es que un "la hora menos de Canarias", nos tienen a menos?

Saludos,
José Magide

EnviarImprimir

No soy católico, ni siquiera me considero religioso, tengo 31 años, por lo cual se infiere que pertenezco a esa generación que se le inculcó que la religión era el "opio del pueblo". Esto no me ha impedido dedicar extensas lecturas a La Biblia y, a su vez, a la historia de la iglesia. No sé por qué se complican tantas personas en dar diferentes versiones a la letra expresada en el sagrado libro, para mi es tan sencillo como "brinda amor y no repares en recibirlo", respeta a todos y no condenes, pues no eres tu libre de pecado, y ya. Y es en este espíritu que surge la pastoral del año 1993, El amor todo lo puede, y esta última, No hay patria sin virtud. Algún día se le dará a la iglesia cubana el tremendo crédito que merece por el papel que ha jugado en la década de los noventa en la inmóvil sociedad castrista. La forma en que los líderes católicos se mantienen "cuasi ajenos" a la bazofia del diario acontecer político de la Isla, la magistral manera en que el Cardenal Ortega se manifiesta mostrando respeto a la disidencia pero alejado de sus avatares, le otorgan un tremendo peso a la magnífica pastoral que hizo aparecer en días recientes en todas la parroquias cubanas. Ahora sólo queda esperar las consabidas respuestas oficiales de los escribas del Faraón que, como en 1993, deben acusar a los clérigos de cuanta preconcebida amalgama de improperios pulula en el manual de adjetivos "granmistas-prensalatinistas" siempre a mano para rebatir ideas confusas y "apátridas".

Angel Tur,
Lexington

Referencias
Habló la Iglesia
EnviarImprimir

Luis Manuel García en su artículo El país que sí existe nos plantea varias preguntas que me gustaría aclarar. Empezando por el título. País: (Del fr. Pays < latín vulgar pagensis, el que vive en el pago) territorio limitado por una unidad geográfica, política o histórica. De acuerdo con esta definición de nuestra lengua el país no existe. Nadie vive en el pago. Nadie paga impuestos que permitan reclamar derechos. Primero, la unidad histórica fue rota y la unidad política (es decir, La República) como forma de gobierno también. Esto quiere decir que los que allí viven y lo hacen tan solo en la geografía (como los primitivos) y los que vivimos fuera, vivimos haciendo referencia a lo mismo o a la nostalgia. Segundo, lo de Made in USA o Made in Europe, para el caso es lo mismo, es de afuera. El concepto de nación es un invento europeo, la república también, con perfeccionamiento americano. Y la lucha por los derechos civiles fue creada en USA. En el exilio se conservan las tradiciones y la historia negada, desde el sandwich Helena Ruth hasta el bichón habanero, toda la unidad histórica, y además se conserva el abanico de pensamiento (desde el conservador hasta el anarquista) existente en la Cuba republicana, la forma en que fue imaginada y concebida la nación. La democracia es la vocación del país desde su imaginación primera. La revolución es una negación y una ruptura con esa continuidad. Es por ello que Díaz de Villegas reclama una anexión de la Isla a su diáspora en un gesto reconciliador de su historia como un cuerpo inerte cuya alma está en otra parte, y cuyas existencias tienen vidas paralelas y fragmentadas que tan solo recuperarán su sentido en la unión. Pero como bien apunta Villegas, de antemano Luis Manuel García se mueve en el zoológico de cristal de lo políticamente correcto, en ese espacio de verdades a medias que garantiza tantos trabajos en las universidades del occidente multiculturalista y contracultural a miles de intelectuales cubanos que saliendo recientemente de la Isla han escuchado disertar a las vanguardias del pensamiento contemporáneo y comprenden que dentro del discurso de lo políticamente correcto no cabe llamar a las cosas por su nombre, y no se puede nombrar como parte de la historia de Cuba a los ex guerrilleros del Escambray o a los que gritaron: ¡Viva Cristo Rey! Es por eso que el Proyecto Varela en sus ojos se convierte en lo más importante de la historia de Cuba después de Girón. Eso lo aclara muy bien Zoe Valdés en su artículo con respecto al mismo tema Payá y pacá.

Fidel Torres

Referencias
El país que sí existe (LUIS MANUEL GARCíA)
Re-varelización (NéSTOR DíAZ DE VILLEGAS)
EnviarImprimir
   
 
Editoriales
Sociedad
Cultura
Internacional
Deporte
Opinión
Desde
Entrevista
Buscador
Cartas
Convocatorias
Humor
Enlaces
Prensa
Documentos De Consulta
Galeria
Galeria
Revista
Revista
Ediciones
 
Nosotros Contacto Derechos Subir