El Ministerio del Trabajo de Cuba ordenará que a partir de octubre se nieguen las licencias para el ejercicio por cuenta propia de unos 40 oficios.

La jefa de prensa del Ministerio, Nadia Arbezu, confirmó la existencia de una resolución al respecto, pero dijo que "aún está en fase de implementación" y se negó a hacer comentarios, informó la BBC.

La resolución 11/2004 terminaría con la concesión de licencias para ejercer de forma privada a payasos, magos, vendedores ambulantes de varios tipos de productos, masajistas, herreros, fabricantes de coronas fúnebres, compradores-vendedores de libros usados y operadores de audio para fiestas, entre otros.

La orden estipula que quienes ya tienen licencia en esas actividades pueden continuar ejerciéndola, pero aclara que no se autorizarán traspasos a familiares de los titulares ni se otorgarán nuevos permisos.

El gobierno cubano autorizó el trabajo por cuenta propia a mediados de los años noventa, en medio de una fuerte crisis económica y de la incapacidad del Estado para brindar servicios elementales.

Decenas de miles de personas se acogieron a esa posibilidad de trabajo, pero desde el principio las autoridades de la Isla establecieron fuertes regulaciones e impuestos para mantener la actividad bajo control.

Algunos dueños de negocios, como restaurantes llamados "paladares", lograron hacer pequeñas fortunas; pero la mayoría de los cuentapropistas sólo ha ganado para cubrir sus necesidades básicas.

Según la BBC, la resolución 11/2004 dice que la reanimación económica del país permite que "un grupo de estas actividades sean asimiladas por diferentes órganos y organismos de la Administración Central del Estado".