La exposición Carmen Herrera: Cinco décadas de pintura, una retrospectiva de pinturas de esta artista cubana, se inaugura este martes en el Latin Collector Gallery como parte del programa del Festival de las Artes Cubanas de Nueva York.
Con una colección que incluye lienzos realizados desde 1949 a 1996, la muestra permanecerá abierta hasta el 31 de julio y está considerada una de las presentaciones más completas que hasta la fecha se hayan hecho de la obra de Herrera.
Los trabajos de la pintora se enmarcan dentro de la tradición que comparten los artistas de la vanguardia rusa y europea de comienzos del siglo XX, y también dentro de la producción de las décadas del treinta, cuarenta y cincuenta de artistas de Suramérica.
Sobre su obra, el crítico de arte de The New York Times,Holland Cotter, escribió que su "estilo pictórico, ingenioso e incisivo (…) tiene puntos de contacto con Mondrian, Ellsworth Kelly y el Op Art, pero tiene una conexión más inmediata con las obras del vanguardismo neoconcreto de artistas como Lygia Clark y Helio Oiticica, quienes prosperaron en Brasil después de la Segunda Guerra Mundial".
Así, la propia Herrera ha dicho de la creación que "es un proceso en que debe escoger, entre innumerables posibilidades, aquella que logre un balance entre la razón y la ejecución visual".
Carmen Herrera (La Habana, 1915) reside y trabaja en Nueva York desde 1954. Estudió en la Academia de Bellas Artes de San Alejandro, en La Habana, y continuó en el Marymount College de París, la Escuela de Arquitectura de La Habana y en la Arts Students League de Nueva York. De 1948 a 1954 vivió en París.
Ha expuestos sus trabajos en muestras colectivas y personales en París, La Habana, Zurich, Toronto y Nueva York, y sus obras integran las colecciones permanentes de la Fundación Cintas, Rusk Foundation Collection y El Museo del Barrio, en Nueva York, así como del Museo de Bellas Artes de La Habana y del Museo Bacardí, en Santiago de Cuba. |