Un proyecto de ley del gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva para controlar el ejercicio de la profesión periodística ha generado controversia en Brasil.

El proyecto, presentado al Parlamento brasileño, propone crear un Consejo Federal de Periodismo para "orientar, disciplinar y fiscalizar" el ejercicio de la profesión, y con potestad para "castigar" a quienes violen las normas, informó la BBC.

El ministro brasileño de Justicia, Marcio Thomaz Bastos, se ha declarado "favorable" a la creación del organismo.

No lo "considero un instrumento de censura ni de restricción a la prensa, sino disciplinante de la profesión", dijo.

Se trataría del "órgano supremo de fiscalización del periodismo y de su ejercicio en todo el territorio nacional", de acuerdo con el proyecto, y contaría con representaciones regionales, en las que los profesionales tendrían que registrarse.

Según la versión del jefe de Comunicación y Gestión Estratégica del gobierno, Luiz Gushiken, el Consejo sería un instrumento para "proteger a los periodistas y a la sociedad".

La Federación Nacional de Periodistas de Brasil apoya la creación del organismo, pero la Asociación Brasileña de Prensa se opone.

Igualmente lo rechaza un grupo de periodistas, intelectuales y políticos, algunos de los cuales pertenecen al Partido de los Trabajadores (PT), de Lula.

"En nombre de una buena intención, podemos estar dando el primer paso para la tragedia de la censura", opinó Cristovam Buarque, ex ministro de Educación de Lula y senador del PT.

Un aliado de Lula, el senador y ex presidente José Sarney, declaró: "Como presidente del Congreso considero que la libertad de prensa debe ser respetada siempre. Excesos todos cometemos. La prensa también puede cometerlos, pero hasta los excesos de la prensa el tiempo los corrige".

Para la Asociación de Magistrados de Brasil, "los abusos y el mal periodismo deben ser corregidos por la Justicia (…) sin necesidad de un órgano con poderes para cercenar la libertar de expresión y cancelar licencias profesionales".

El diario brasileño Folha de Sao Paulo dijo que el proyecto refleja la tendencia "estalinista" del gobierno de Lula, quien ha mostrado desde que llegó al poder disconformidad con los medios de comunicación.

El presidente cree que los medios tienden a priorizar las informaciones negativas sobre las positivas y que la opinión pública tiene sed de "buenas noticias".

El proyecto se presentó al Congreso en momentos en que el gobernador del Banco Central de Brasil, Henrique Meirelles, enfrenta presiones para que dimita a partir de denuncias de prensa sobre irregularidades tributarias.

La prensa se hizo eco también de otro presunto escándalo de corrupción que involucró al ministro de la Casa Civil, José Dirceo.

"En Brasil estamos asistiendo al hecho de que se condene a personas por los titulares de los periódicos", ha dicho Lula.

Sin embargo, el teórico estadounidense de la información Bill Kovach, opinó que el nuevo proyecto "asusta".

"Si el gobierno decide lo que es la 'conducta adecuada' del periodista, éste no podrá ser independiente", dijo, según recoge el Folha de Sao Paulo.