El gobierno panameño aprobó un proyecto que deroga las leyes que afectan la libertad de prensa, promulgadas durante el pasado régimen militar de Omar Torrijos, el padre del actual presidente.

Cumpliendo su reciente promesa ante la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), el mandatario Martín Torrijos y sus ministros de Estado dieron luz verde en la noche del miércoles a ese proyecto, informó AP.

La iniciativa, que debe ser aprobada por la Asamblea de Diputados —donde el gobierno tiene mayoría— deroga las polémicas leyes 11 y 67 de 1978, referentes a los medios y a la publicación de material impreso, así como a la reglamentación de la profesión de periodista. También deja sin efecto un decreto de 1969 que creó una junta de censura.

El proyecto prohíbe la imposición de sanciones por desacato, que estaba contenido en las llamadas leyes "mordaza". Durante el régimen anterior se castigaba a los periodistas hasta con la cárcel si una autoridad consideraba que le habían faltado el respeto.

Al mismo tiempo, el proyecto establece medidas en relación con el derecho a aclaración o réplica a favor de personas que hayan sido ofendidas "infundadamente".

El ministro de Gobierno y Justicia, Héctor Alemán, dijo que se trata del "punto de inicio para que, tanto el Ejecutivo como los gremios y organizaciones (periodísticas), se sumen al esfuerzo conjunto para desarrollar futuras normas que les permitan a los panameños vivir en un país donde imperen la convivencia pacífica, la garantía del debido proceso y el respeto de todo ciudadano a no ser objeto de abusos en los medios".

En virtud de las leyes "mordaza", el gobierno podía también cerrar medios si consideraba que divulgaban material o propaganda "subversiva".

El otrora "hombre fuerte", Manuel Antonio Noriega, clausuró varios medios impresos acusándolos de sedición. Noriega fue depuesto por la invasión de Estados Unidos, el 20 de diciembre del 1989, que marcó el fin de la era castrense.

Los gobiernos que sucedieron al régimen militar no eliminaron esas leyes, pese a los reiterados pedidos de los gremios periodísticos.

El Colegio Nacional de Periodistas expresó sus reservas sobre el proyecto, mientras que el Sindicato de Periodistas lo aplaudió.

"Ojalá que (la iniciativa del gobierno) no sea sólo un acto para congraciarse con la SIP", manifestó el presidente del Colegio, Luis Polo.