www.cubaencuentro.com Jueves, 08 de julio de 2004

 
  Parte 1/2
 
La consagración del inmovilismo
Aritmética del castrismo: Ante cada medida económica externa, mayores restricciones internas, discursos numantinos y baño de multitudes.
por LEONARDO CALVO CáRDENAS, La Habana
 

Como sucede de tiempo en tiempo, por estos días el permanente y ya tradicional enfrentamiento entre los gobiernos de Cuba y Estados Unidos sube de tono con la propuesta en Washington de una serie de medidas encaminadas, según sus animadores, a acelerar las necesarias transformaciones democráticas en la Isla. La consiguiente aplicación de contramedidas en La Habana —como era de esperar— ha reportado afectaciones considerables a la ya bien complicada vida cotidiana del cubano de a pie.

Hombre en la ventana
Castro. ¿Segunda epístola o enésimo ostracismo?

Este nuevo intercambio de regulaciones, que ha venido acompañado de los consabidos calificativos y diatribas, es apreciado por no pocos analistas como una jugada electoral de la Casa Blanca y como un intento del gobierno cubano de encubrir la crisis generalizada que agobia el país. La escalada, además, aviva la interminable discusión sobre la pertinencia, eficacia y viabilidad de la política norteamericana hacia Cuba.

En política, cada acción o proyección trata de lograr un objetivo concreto. Cuando una acción o diseño político sólo reafirma posiciones de principios o impone simbólicas penitencias al adversario que se quiere derrotar, estamos quedando a medio camino entre el esfuerzo emprendido y el resultado deseado. Pero si esa acción o proyección se convierte en la principal herramienta o fundamento argumental del adversario, entonces el diseño es contraproducente, en tanto nos aleja del objetivo originalmente planteado.

Muchas veces, las acciones y diseños norteamericanos han posibilitado a las autoridades de La Habana endurecer su discurso, apretar las clavijas internas, afianzar posiciones y, sobre todo, justificar su pobre vocación democrática. Hace poco más de un año, el gobierno cubano aprovechó "las actividades" de diplomáticos norteamericanos destacados en Cuba para desatar la más injusta y ensañada ola represiva contra la oposición interna. Ahora, la sola propuesta de nuevas medidas de presión es tomada como coartada para aumentar las penurias de la ciudadanía, como única respuesta a la probada ineficiencia y a la extendida corrupción que ensombrecen el presente nacional y comprometen seriamente el futuro.

Supervivencia en el límite

El pueblo cubano está sometido a la desinformación y manipulación permanentes, pero ciertamente no es analfabeto. Cada día crece el cuestionamiento de por qué cuando el gobierno cubano dice sentirse amenazado por su enemigo externo, y lanza sobre su ciudadanía toda suerte de represiones administrativas y políticas que llevan a límites críticos la ya agobiante supervivencia cotidiana.

A cada medida de presión de Estados Unidos, el régimen de La Habana responde con mayores restricciones internas, más discursos apocalípticos y numantinos y grandes baños de multitudes con los que pretende justificar el fanatismo inmovilista que le caracteriza. La historia enseña que ningún gobierno democrático moviliza millonarias multitudes. En las sociedades libres eso sólo lo logran las causas sensibles como los derechos civiles o el antiterrorismo. Los gobiernos democráticos tienen asegurada la crítica y el cuestionamiento permanente de los ciudadanos, y en todo caso, la serena aprobación electoral de los gobernados. Sólo los regímenes totalitarios, gracias a sus eficientes mecanismos de coerción, amenazas y chantajes, tienen garantizado el "respaldo unánime" hasta el día antes de su caída, estrepitosa o tranquila.

1. Inicio
2. Pero también...
   
 
EnviarImprimir
 
 
En Esta Sección
¿Más dolor que alivio?
MARIFELI PéREZ-STABLE, Miami
El martillo de Menoyo
JOSé H. FERNáNDEZ, La Habana
Tres pasos chéveres para ser libres
JHF, La Habana
Editoriales
Sociedad
Represión en Cuba
Cultura
Internacional
Deporte
Opinión
Desde
Entrevista
Buscador
Cartas
Convocatorias
Humor
Enlaces
Prensa
Documentos De Consulta
Ediciones
 
Nosotros Contacto Derechos Subir