El juicio contra Luis Posada Carriles y otros tres cubanos acusados de asociación ilícita para delinquir, posesión ilegal de explosivos y documentos, y delitos contra la fe pública concluyó el miércoles en Panamá, dos días ante de lo previsto, informó la AFP.

El juez José Hoo dijo a la prensa que se acogerá al código panameño, que le permite dictar sentencia de 10 a 30 días después de terminar el juicio, pero advirtió que podría demorar su anuncio por lo voluminoso del expediente.

Según EFE, Hoo señaló que "se trata de una causa muy compleja". Son 45 tomos con "miles y miles" de páginas, precisó. "Mi fallo será justo, de acuerdo al derecho y en el estricto marco de la legalidad", aseguró.

Posada Carriles, de 78 años, fue detenido el 17 de noviembre de 2000 en Panamá, junto a Pedro Crispín Remón, Guillermo Novo Sampoll y Gaspar Jiménez, acusados por Fidel Castro de preparar un plan para matarle con una bomba durante la X Cumbre Iberoamericana.

Rogelio Cruz, abogado defensor de Posada Carriles, dijo a la AFP que el fallo "se conocerá en menos de un mes y será de absolución".

"Mi expectativa es que todos los acusados salgan libres, porque en el juicio no se les pudo vincular a un plan para matar a Castro y en la presentación de los alegatos derrotamos con contundencia a los acusadores", aseguró Cruz.

El juicio, que se inició el pasado lunes, incluyó al empresario cubano César Matamoros y al panameño José Hurtado, quienes habrían facilitado la logística y el transporte a los acusados cuando estuvieron en Panamá.

Por los cargos de asociación ilícita para delinquir, posesión ilegal de explosivos, posesión ilegal de documentos y delitos contra la fe pública, los procesados podrían recibir condenas de entre 10 y 12 años de cárcel.

Los abogados acusadores y el fiscal, Arquímedes Sáez, han solicitado la sentencia máxima.