AFP/ La Habana. Fidel Castro no asistió a la XIII Cumbre Iberoamericana por "razones de trabajo", dice la justificación ofrecida por las autoridades de la Isla. Sin embargo, portavoces de la disidencia creen que el gobernante eludió comparecer ante la comunidad internacional y responder por las violaciones a los derechos humanos en Cuba.
"Castro no quiere enfrentar el cuestionamiento que le harán los países iberoamericanos con respecto a los derechos humanos en Cuba, en especial sobre la situación de los 75 opositores pacíficos que están encarcelados" desde marzo pasado, dijo a la AFP Gisela Delgado, directora del Proyecto de Bibliotecas Independientes y esposa del opositor Héctor Palacios, condenado a 25 años de cárcel.
Los comentarios y opiniones sobre la tercera inasistencia consecutiva de Castro a una Cumbre Iberoamericana se desataron en la Isla apenas conocerse que el gobernante, de 77 años de edad, no estaba al frente de la delegación que viajó a Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, sede del encuentro de viernes y sábado.
El diario oficialista Juventud Rebelde publicó el viernes una declaración del vicepresidente Carlos Lage efectuada a la prensa cubana en Bolivia.
"El compañero Fidel no ha podido asistir a esta Cumbre por razones de trabajo. Todos nosotros conocemos perfectamente bien con que entrega y pasión se dedica Fidel al trabajo y a las tareas de todos los días", sostuvo Lage, que encabezó la delegación cubana.
Pero "la explicación oficial" no complació a los dirigentes de la disidencia que opera en la Isla, quienes estiman que la ausencia de Castro al conclave regional tiene otras motivaciones.
"En la Cumbre están representados muchos países con los cuales Cuba tiene una relación de gran tirantez, como España, México, Uruguay y otros más, y el presidente Fidel Castro no quiere enfrentamientos", señaló el abogado René Gómez Manzano, integrante de la opositora Asamblea Para Promover la Sociedad Civil.
Añadió, sin embargo, que la inasistencia del mandatario cubano a la cita también pudo "deberse a la dificilísima situación económica que atraviesa el país. Las perspectivas de futuro son negras y (Castro) pudo quedarse debido a esta delicada situación doméstica".
Gómez Manzano indicó que hay "muchos factores" que los ciudadanos desconocen y que "también podrían explicar la ausencia de Castro" en Bolivia. Citó, "por ejemplo, el estado de salud del señor presidente o de su hermano Raúl (Castro, ministro de Defensa y segundo hombre en la jerarquía cubana). Aquí nada se sabe", sentenció.
En opinión de Vladimiro Roca, dirigente de la oposición socialdemócrata, "hay una evidente pérdida de apoyo y fuertes críticas al gobierno de Cuba después de la represión desatada contra la disidencia en marzo pasado, que incluye a organizaciones y personalidades de izquierda" de todo el mundo.
El activista Elizardo Sánchez Santacruz coincidió con Roca y consideró que la inasistencia de Castro "es una opción que escoge para no verse en la necesidad de dar respuestas ante la comunidad internacional, que le reclama en forma continua una apertura democrática" en la Isla.
La última Cumbre Iberoamericana a la que asistió Castro fue la de Panamá, en 2000. |