Unos 200 cubanos residentes en 40 países, fundamentalmente en Estados Unidos, asistirán a la III Conferencia La Nación y la Emigración, que sesionará el próximo fin de semana en La Habana, dijo este martes el canciller cubano, Felipe Pérez Roque, informó la AFP.

"Esperamos que (la reunión) constituya un espacio de diálogo respetuoso, serio, prueba de nuestra voluntad de mantener el diálogo con los cubanos en el exterior", dijo Pérez Roque, quien aprovechó la oportunidad para agregar que el encuentro se celebrará "pese a la situación creada con las nuevas y brutales medidas del gobierno de los Estados Unidos".

El pasado 6 de mayo, Washington dio a conocer una serie de medidas que endurecen el embargo sobre Cuba. Entre las nuevas restricciones está la reducción de los viajes de cubanoamericanos a la Isla y el aumento de condiciones para el envío de remesas.

El gobierno cubano respondió con el anuncio de un alza de precios de artículos y combustibles en dólares. La medida podría ser aplicada "en los próximos días", dijo el canciller en conferencia de prensa.

Según el ministro, ya están en Cuba 140 de los 1.000 invitados por las autoridades cubanas, entre los que no fueron incluidos aquellos residentes en el exterior que, para las autoridades de la Isla, mantienen una posición beligerante hacia el gobierno de Fidel Castro.

Uno de los asistentes a la Conferencia será el líder de Cambio Cubano, Eloy Gutiérrez Menoyo, quien en agosto pasado anunció que se quedaba en la Isla para "hacer oposición". Desde entonces permanece Cuba. Las autoridades no han aclarado su estatus, pero tampoco le han obligado a marcharse.

"Sí, Menoyo está invitado; sobre su estatus todavía no hay decisión", dijo Pérez Roque a la prensa, según el diario español El País.

Gutiérrez Menoyo es un ex comandante de la revolución que abandonó Cuba por desacuerdos con el régimen instaurado en 1959. Luego regresó a la Isla como parte de un intento armado para derrocar a Castro y pasó 22 años en prisión. En su exilio en Miami fundó Cambio Cubano.

Alrededor de 1,5 millones de emigrantes cubanos y sus descendientes están asentados en unos 100 países, de ellos 1,3 millones en Estados Unidos, principalmente en el Sur del estado de Florida, en Nueva York y en Nueva Jersey.

El canciller cubano dijo que con las recientes decisiones de Washington "ha quedado bien claro quien se opone al intercambio familiar: el gobierno de Estados Unidos".

Pérez Roque anunció que para esta III Conferencia será abolido el permiso de entrada —desde el 1 de junio— que los emigrados precisaban para viajar a Cuba. En lo adelante los residentes en el exterior deberán contar con un "pasaporte habilitado". Pero La Habana seguirá negando la entrada a la Isla a aquellos cubanos que, a su juicio, realizan "actividades dañinas o repugnantes" para el país.

El canciller añadió que en el encuentro se discutirá también el período de estancia en Cuba de los emigrados, hasta ahora de un máximo de un mes, aunque afirmó que la práctica indica que el 93% de los emigrantes que visitan Cuba lo hace por un período menor a 15 días.

Según el funcionario, en 2003 un total de 167.710 emigrados cubanos visitaron la Isla, de ellos 115.142 procedentes de Estados Unidos. Esa cifra "es muy superior" a los 34.000 que lo hicieron en 1994, señaló.

Pérez Roque afirmó que más de 113.000 cubanos residentes en la Isla viajaron el año pasado al exterior, pero sólo 6.757 lo hicieron a Estados Unidos, "porque el gobierno de ese país no le dio la visa" a todo el que la solicitó. La cifra contrasta con los 37.983 residentes en Cuba que viajaron a Estados Unidos de visita en 2000.

Interrogado sobre el permiso de salida que deben solicitar y obtener los residentes cubanos para viajar al exterior, Pérez Roque señaló que eso "no está en examen en este momento".