Los cubanos que reciben remesas de sus familiares residentes en Estados Unidos serán los más afectados con la revaluación de un 8% del peso convertible cubano, admitieron el viernes directivos bancarios, según AFP.

"No tenemos nada en contra de que un ciudadano tenga dólares, pero hay que entender que está en una posición más ventajosa que el que no tiene", dijo el presidente del Banco Central de Cuba (BCC), Francisco Soberón, en un programa de la televisión oficialista dedicado al tema.

En la noche del jueves, Fidel Castro anunció que a partir del 9 de abril próximo termina la paridad uno a uno del peso convertible cubano con el dólar estadounidense, vigente desde 1994, y que la divisa interna de la Isla se revalúa en un 8%.

Esa medida afecta por igual a otras divisas extranjeras como el euro, la libra esterlina, el dólar canadiense, el franco suizo, el yen japonés, las de más frecuente canje en Cuba.

La paridad uno a uno del peso convertible con el dólar, mantenida desde la creación de la divisa interna cubana en 1994, "es artificial y no refleja una relación real de valor entre ambas monedas", dijo Castro el jueves por la noche, al leer un acuerdo del Comité de Política Monetaria del BCC.

En una "intervención especial", la segunda en seis días, Castro añadió que esa relación artificial entre ambas monedas "crea un efecto distorsionador en la formulación de una sana política monetaria" nacional.

Miles de cubanos reciben remesas monetarias de sus familiares en el exterior, fundamentalmente desde Estados Unidos. Fuentes no oficiales calculan en alrededor de 1.000 millones de dólares la cantidad de dinero que ingresa a la Isla por este concepto.

Ese dinero, que llega al país por distintas vías, entre ellas la compañía Western Union, era entregado en dólares físicos a sus destinatarios.

Pero el 25 de octubre pasado, el gobierno cubano dispuso la retirada del dólar de la circulación y un gravamen del 10% para el canje de la divisa estadounidense física (no bancaria) por pesos convertibles.

A esa afectación, se une ahora la revaluación del peso convertible, de tal manera que la persona que compre pesos convertibles con dólares en la Isla a partir del 9 de abril, recibirá aproximadamente 0.8441 pesos convertibles por cada dólar, explicó el vicepresidente del BCC, Jorge Barrera.

"Me parece que tampoco es un sacrificio tan grande" para los familiares enviar aproximadamente un 20% de dinero a sus parientes en la Isla para no afectarlos, señaló Soberón.

No sucede igual con las personas que reciben el dinero por transferencia bancaria o tarjetas de créditos, a los que sólo se aplica el 8%, explicó Barrera.

La revaluación del 8% del peso convertible afecta también a turistas y extranjeros residentes en la Isla que reciben dinero desde el exterior por diferentes conceptos.

Soberón explicó que esta medida, y la revaluación del peso cubano frente al convertible decretada una semana antes "forma parte de una estrategia muy coherente, que busca cada día dar mayor valor al peso cubano".

Castro dio "absoluta garantía" a quienes tienen cuentas bancarias en divisas o a quienes las abran antes del 9 de abril, de que sus ahorros no se verán devaluados.

"Las cuentas bancarias en dólares estadounidenses, tanto las ya existentes, como las que deseen abrir hasta el día 9 de abril, no serán afectadas por la medida", dijo el gobernante.