AFP/ La Habana. Más de 2,6 millones de cubanos sufren las consecuencias de la prolongada sequía que afecta a casi toda la Isla y la mitad de ellos ya no recibe agua potable en sus casas, afirmó una funcionaria del gobierno a la prensa local.
La vicepresidenta del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH) de Cuba, Aymée Aguirre, dijo al diario oficialista Granma que más de 1,3 millones de cubanos son abastecidos de agua mediante carros cisternas, sobre todo en el oriente de la Isla, la región más afectada por la falta de lluvias.
Agregó que abril pasado fue "un mes medio seco, pues cayeron 51 milímetros de agua, el 71% del acumulado histórico", pero añadió que en "seis territorios no llegaron ni a la mitad de las lluvias esperadas" para el período.
La funcionaria precisó que al cierre de abril el total de agua acumulada en los embalses de la Isla era de sólo el 27,1% de la capacidad total instalada.
Señaló que de las 235 presas actualmente en explotación en Cuba, 148 se encuentran al 25% de sus respectivas capacidades útiles, mientras que otras 58 ya están fuera de servicio por sus bajos niveles de agua.
Según cifras oficiales, la prolongada sequía que afecta a casi todo el territorio provocó en 2004 pérdidas superiores a los 800 millones de dólares sólo en el sector agrícola.
Por su parte, el Director del Instituto Nacional de Investigaciones de Viandas Tropicales de Cuba (INIVIT), Sergio Rodríguez, afirmó recientemente que la sequía "provocó la disminución en 30% de la producción de viandas (raíces y tubérculos) a escala nacional en el primer trimestre del año".
Dijo que "no sólo en Oriente, sino en lugares de la región central y occidental (los cultivos) han tenido muchos impactos negativos por la carencia de agua" y recordó que 2004 fue el "más seco de los últimos 103" años en Cuba. |