Las autoridades cubanas reconocieron este lunes la muerte de ocho niños en La Habana y dijeron que los casos "están siendo sometidos a meticuloso estudio con el propósito de determinar las causas y circunstancias precisas y su vinculación con la situación higiénico-epidemiológica" que existe en la Isla, informó la AFP.
El Ministerio de Salud Pública (MINSAP) llamó a la población a "extremar" las medidas de higiene, en un comunicado dado a conocer "en respuesta a inquietudes de la población".
En el texto, publicado por el diario Granma y el semanario Trabajadores, ambos bajo control del gobierno —como el resto de los medios de comunicación de la Isla—, el MINSAP dijo que tras el paso del huracán Dennis por la Cuba, hace dos semanas, se ha detectado "un incremento de casos con síntomas digestivos, respiratorios, fiebres y eventualmente signos precoces de insuficiencia cardiorrespitratorias".
A las afectaciones que dejó Dennis en Cuba en materia de abastecimiento de agua, combustible doméstico y electricidad, se suman —según la nota— "niveles de temperatura excepcionalmente elevados e intensas lluvias, que favorecen el incremento de enfermedades que afectan mayoritariamente a la población infantil".
"En este contexto, han ocurrido en nuestra capital ocho fallecimientos de menores", señaló el texto que no precisó las fechas de los decesos, la identidad y las edades de los niños.
La noticia fue divulgada la noche el domingo en el noticiero de la televisión local, y este lunes empezaba a ser tema de comentario e inquietud entre la población.
"Estoy muy preocupada, no estamos acostumbrados (en Cuba) a que esto suceda, tengo plena confianza en el sistema de salud, pero no dejo de preocuparme", dijo este lunes a la AFP una mujer de 37 años, madre de dos niños y trabajadora de la televisión local.
"Le pedí al niño que no coma ni beba nada en la calle", agregó.
La baja tasa de mortalidad infantil es uno de los elementos que el gobierno cubano suele exhibir entre los "logros de la revolución".
El MINSAP instó a la "población a extremar las medidas higiénicas y a colaborar con las acciones que desarrollan organismos en la capital" para mejorar el saneamiento ambiental, la calidad del agua de consumo y el control en la elaboración y expendio de alimentos.
Indicó que el sistema de salud otorga la máxima atención y seguimiento a estos casos, en todas sus instituciones, y dijo que para ello movilizó a "profesionales del más alto nivel y trabajadores en general". |