La Iglesia católica cubana llamó a terminar con el "Estado justiciero que exige sacrificios y ajusta cuentas", y pasar a uno "misericordioso dispuesto a tender una mano compasiva antes que a ejercer controles y sancionar la infracción", informó la agencia AP.
El reclamo es parte de una carta pastoral, firmada por el cardenal Jaime Ortega, que salió a la luz el lunes por la noche con motivo del 150 aniversario de la muerte del sacerdote independentista Félix Varela.
Ortega consideró, no obstante, que debe perseguirse con mano dura la delincuencia, el tráfico de drogas "y todo cuanto corrompa y dañe al prójimo".
"Muchos hermanos nuestros se vuelven a la Iglesia en Cuba pidiendo una palabra de futuro porque existe en el pueblo cubano un temor difuso y generalizado al porvenir", afirmó la carta pastoral.
Ortega, arzobispo de La Habana, señaló la pobreza como uno de los factores de desintegración en la familia cubana.
"Aunque la escuela y la salud son gratuitas, los salarios en general no se ajustan al costo de la vida", consideró y criticó duramente los altos impuestos a las escasas actividades privadas.
"Existe un problema ético en la distribución de la riqueza, esta debe hacerse con justicia. Pero exige también una postura ética ante el hombre que es capaz de enfrentar con su labor el déficit económico de su familia", dijo. La solución más frecuente es "irse de Cuba".
El documento rechazó también la promiscuidad sexual, el aborto, los divorcios y la falta de colegios católicos para los jóvenes. Además, el texto se refirió a otros problemas sociales del país como los matrimonios fracasados y el abandono de los hijos.
La carta pastoral fue dada a conocer por el vocero de la Conferencia de Obispos Católicos de la Isla, Orlando Márquez, quien exhortó a "no subestimar el conocimiento que la Iglesia tiene de la realidad nacional". |