www.cubaencuentro.com Jueves, 13 de noviembre de 2003

 
 
 
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Con la victoria de anoche ante los Cachorros de Chicago, los Marlins siguen luchando por el cetro de la Liga Nacional. Mientras tanto, en la Americana, el pinareño José Ariel Contreras se impone en su nuevo rol de relevista.
por ALBERTO ÁGUILA, Miami
 

Un importantísimo jonrón con uno en base del cubanopuertorriqueño Mike Lowell, permitió el domingo a los Marlins de la Florida obtener una ventaja decisiva en el partido frente a los Cachorros de Chicago, a quienes finalmente doblegaron 4 por 0. Con el triunfo, los Peces mantienen vivas sus esperanzas de llevarse el cetro de la Liga Nacional, cuya serie final proseguirá mañana con el sexto partido en Chicago.

Mike Lowell
Mike Lowell.

Hasta ahora, los Cachorros del manager Dusty Baker llevaban la voz cantante, al imponerse tres veces en los cuatro primero desafíos, pero el batazo de Lowell, conectado en el cuarto episodio y cuando el juego estaba cero a cero, proporcionó una ventaja a la postre decisiva, debido a la colosal faena del derecho Josh Beckett, quien dejó en dos solitarios imparables al equipo de Sammy Sosa.

Por los Marlins, también despacharon jonrones el utilísimo receptor boricua Iván Rodríguez y el norteamericano Jeff Conine, adquirido a última hora por la nave floridana.

Esta no es la primera vez que Mike Lowell, hijo de cubano y boricua, sale por la puerta grande en estos play-offs. En el primer encuentro terminó como héroe, al despachar un jonrón decisivo como bateador emergente en el onceno inning, batacazo que sirvió para romper un empate a 8 anotaciones.

Durante la campaña regular, el cuarto bate de los Peces conectó 32 películas de 4 esquinas e impulsó 105 carreras; quedó líder de su equipo y fue uno de los primeros del circuito, a pesar de estar ausente en unos 30 juegos al ser golpeado por un lanzamiento que le fracturó una mano.

La serie se reanudará mañana en el parque Wrigley Field, sede de los discípulos de Baker, quien enviará a la lomita al astro derecho Mark Prior, un lanzador que, de ganar, le daría el banderín de la Liga a los Cachorros y de paso el derecho a discutir la Serie Mundial con el ganador entre los Yankees de Nueva York y los Medias Rojas de Boston.

Una victoria más de lo Peces, en cambio, significaría ir al séptimo juego, donde los Marlins tendrían que cruzar por encima de otro duro escollo: el imponente Kerry Wood, líder en ponches del viejo circuito en la temporada regular y, al igual que Prior, con una victoria a su haber en esta serie final.

Mientras esto ocurre, en la Liga Americana las presentaciones del cubano José Ariel Contreras han sido notorias. El derecho de Vueltabajo ha visto acción en los tres primeros choques del tope Yankees-Boston, siempre como relevista. En la primera ocasión proporcionó un cero de ponches; al día siguiente y con el partido ligeramente a su favor, ponchó con facilidad en el octavo capítulo al siempre temible tercer bate Nomar Garciaparra, y en el noveno liquidó con otro ponche al peligroso Manny Ramírez, para después salir del quinto y el sexto hombre en la tanda de Boston con sendos elevados al cuadro. Ya en el tercer partido, Contreras salió a taponear en el séptimo y preservó la victoria, por lo que hasta ahora se ha convertido en un verdadero puntal en el staff de relevistas neoyorquinos. A día de hoy, su promedio de carreras limpias en octubre es de 0,00.

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