AFP/ La Habana. La lancha de pasajeros secuestrada el miércoles regresó a Cuba en la madrugada del jueves, pero los asaltantes mantienen el control de la nave y amenazan la vida de decenas de pasajeros que están en su interior si no se les provee de combustible para emigrar a Estados Unidos, informó este jueves el gobierno en un comunicado.

Dos mujeres y un hombre, "en condiciones delicadas de salud", fueron liberados por los secuestradores —un grupo de entre 8 y 10 personas, según el reporte—, que retienen a cerca de 40 pasajeros como rehenes.

La nave se encuentra amarrada a unos 10 metros de un muelle del puerto de Mariel, donde las autoridades mantienen contacto radial con los asaltantes para negociar una salida pacífica a la situación.

"Se empleará la fuerza si la situación de los rehenes se hace crítica", añade la escueta nota oficial.