AFP/ La Habana. El líder de los cocaleros bolivianos, Evo Morales, negó en La Habana haber recibido asesoría y financiamiento de Fidel Castro y el presidente venezolano Hugo Chávez, como han denunciado funcionarios estadounidenses.

"Quiero denunciar algo, que permanentemente hemos sido amenazados o chantajeados o finalmente acusados falsamente", dijo Morales, uno de los principales líderes de la oposición boliviana, la noche del martes al impartir la conferencia Necesidad de lucha de nuestros pueblos, en presencia de Castro.

Morales participa en el III Encuentro Hemisférico de Lucha contra el ALCA (Área de Libre Comercio de las Américas), que patrocina y acoge La Habana desde el pasado lunes y que se clausura este jueves.

Precisó que las acusaciones han partido del subsecretario de Estado para América Latina, Roger Noriega, el subsecretario de Estado para Asuntos Andinos, Phillip Chicola, y del enviado especial para la región del presidente George W. Bush, Otto Reich.

"Estos caballeros están enfermos, porque sólo acusan y no presentan ninguna prueba. Habría que ser solidarios con estos tres caballeros de la Casa Blanca y habría que dotarlos de unos siquiatras para que mejoren su salud".

"Últimamente dicen que desde Cuba me asesoran para voltear presidentes, que Hugo Chávez me da plata para voltear presidentes", indicó Morales, quien encabezó las revueltas populares que forzaron la renuncia de Gonzalo Sánchez de Lozada, el pasado año, y dejaron varias decenas de muertos.

"Yo veo que los movimientos sociales en Latinoamérica, el movimiento indígena, se convierten cada día que pasa en pesadilla de Estados Unidos. Por eso esta clase de intervenciones o acusaciones permanentes contra nuestros movimientos", dijo.

Sostuvo que por sus métodos de lucha también ha sido acusado de terrorista. "Terroristas nos acusan de terrorismo, a nosotros que defendemos la vida. ¿Quién es el terrorista? Yo considero que Bush es el primer terrorista del mundo, que masacra a los pueblos", afirmó.

Calificó al actual gobierno boliviano de Carlos Mesa de "medio reformista, moderado, timorato, que no quiere decidir, no quiere entender los planteamientos de los movimientos sociales".

Morales advirtió a Mesa que "si va a seguir al servicio de las trasnacionales, como lo quiere hacer hasta este momento, con seguridad va a tener problemas muy serios", y amenazó con nuevas movilizaciones contra el gobierno.