Un nuevo motín carcelario, el segundo en 20 días, tuvo lugar el martes pasado en el Combinado del Este, el mayor centro penitenciario de Cuba. El incidente dejó varias decenas de heridos, informó este jueves en un comunicado Elizardo Sánchez Santacruz, presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN).
"Varias veintenas de reclusos resultaron heridos o intoxicados por gases, algunos de ellos gravemente" y otros "han sufrido quemaduras muy intensas con peligro inminente para la vida de al menos uno de ellos", dijo Sánchez Santacruz, según AFP.
El disidente afirmó que "lo más inexplicable de todo" es el silencio de los medios de prensa locales, todos bajo control estatal.
Un primer motín, con un saldo de una decena de heridos, tuvo lugar el 19 de marzo pasado en la misma prisión, ubicada al este de La Habana.
Interrogado en una conferencia de prensa sobre esa primera protesta, el canciller Felipe Pérez Roque afirmó que se trató de un "incidente menor y aislado", que en cambio "recibió un enorme despliegue mediático".
El funcionario explicó en aquella ocasión que el motín se produjo cuando "un grupo de reclusos por delito común, con cierto nivel de peligrosidad", se rebeló ante una decisión administrativa que "perseguía mejorar sus condiciones de vida" y se dispuso su traslado hacia otra cárcel, que no identificó.
Para Sánchez Santacruz, "estas protestas han tenido lugar debido a las condiciones infrahumanas de internamiento que caracterizan al sistema carcelario cubano, la pésima alimentación, insuficiente atención médica y la extrema severidad de las cárceles".
En ese sentido, añadió que también influye "la política de traslado masivo de prisioneros hacia cárceles muy alejadas de sus hogares".
No existen datos oficiales sobre la población penal de Cuba, que la CCDHRN calcula en "varias decenas de miles". Según esa organización, sólo en el Combinado del Este hay "entre 4.000 y 5.000 reclusos". |