www.cubaencuentro.com Jueves, 13 de noviembre de 2003

 
Parte 5/5
 
Carta a Sherlock Holmes
por RAMóN FERNáNDEZ LARREA, Barcelona
 

La otra incóñita maliña es la siñiente: Si el socialismo es científico, ¿por qué no lo experimentaron antes con animales? Creo tener una respuesta cercana: nadie es probeta en su tierra.

Ahora bien, señor Holmes, comienzo con ciertas, ligeras, leves, alígeras, diminutas observaciones que pueden ser recomendaciones para que su trabajo no se vaya al garete. Sea productivo con lo inductivo y lo deductivo, pero sin alzar mucho el dedu ante los indus. Y no le vaya a soltar a ningún indígena, y menos a los que representan la autoridad, aquel disparate suyo de: "Tengo una vieja máxima: cuando se ha excluido lo imposible, lo que queda, aunque improbable, tiene que ser la verdad". ¡Muchachoooooo! ¡Eso es candela viva! En primer lugar, las máximas, allí, no se le pueden ocurrir a usted, sino al máximo, que está viejo, es cierto, pero sus máximas también, de manera que no juegue con lo posesivo. No mencione lo excluido, porque le excluyen lo más máximamente que se pueda. Y no se le ocurra mencionar lo imposible: en aquel país no existe. Bueno, como la verdad, pero la gente teme a la maximación y se pone vieja en eso.

Listica de recomendaciones para el listo de la cachimba

- No vaya vestido con la capa de cuadros a la heladería Coppelia. Lo pondrán a despachar seguro.

- No diga jamás "elemental". Allí "el elemento" es otra cosa. Y no es precisamente espiritual.

- Usted tiene grandes conocimientos sobre venenos: no intente saber qué le echan al picadillo extendido, se volverá texturizado.

- Usted posee igualmente grandes conocimientos de química: no analice los discursos. No intente descubrir qué sustancia ingieren los que discursan, ni sobre qué cauces.

- Usted distingue perfectamente las distintas cenizas de los cigarros: ni las mire; las que dejan los tupamaros y ciertos artefactos hechos en casa se parecen a las cenizas de Bayamo en marzo de 1869. No se vuelva loco.

- Jamás le diga a nadie que vive solo con el doctor Watson. Los cubanos son muy suspicaces y pueden pensar otra cosa. No hay costumbre de parejas de hecho.

- De hecho, no lleve a Watson. Si se enteran de su profesión no lo dejarán salir. O lo tendrá que ir a ver a Venezuela.

- No mencione a Moriarty. Es inútil. Para no moriarty en la Isla, estás obligado a piriarty.

- Y por último, elemental amigo: si quiere que la gente hable con soltura, en vez de llevar su pipa de siempre, lleve una de cerveza. O muchas, que la sed es tremenda.

Muy neblinoso y con los anglios inflamados,
Ramón

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