Los seis cubanos que el miércoles presuntamente desviaron a punta de navaja un avión DC-3 con 37 personas a bordo hacia Cayo Hueso, Florida, enfrentarán cargos por secuestro, informó la CNN.
Los seis sospechosos, todos hombres, irrumpieron en la cabina del avión armados de cuchillos, "tomaron a cuatro de los miembros de la tripulación y los amarraron con cuerdas y cinta, y les exigieron que los llevaran a Estados Unidos", dijo la portavoz del FBI en Miami, Judy Orihuela.
Los demás ocupantes del aparato se encuentran en un centro de detención de inmigrantes en Krome, cerca de Miami, y pueden solicitar asilo en Estados Unidos, aunque se desconoce si alguno lo ha hecho.
Un total de 37 personas —y no 35 como indicó inicialmente el FBI— se hallaban a bordo del avión. Seis eran miembros de la tripulación. Todos son cubanos, salvo una persona de nacionalidad italiana, no identificada, según Orihuela.
El DC-3 cubría una ruta interior cubana entre Isla de Pinos y La Habana, y fue obligado a desviar su ruta poco después de despegar.
Escoltado por cazas militares estadounidenses, el aparato aterrizó el miércoles por la noche en Cayo Hueso, Florida.
Una vez en tierra, los secuestradores se entregaron pacíficamente. Nadie resultó herido.
El FBI identificó a los autores del secuestro como Alvenis Arias Izquierdo, de 24 años, Alexis Norniella Morales (31), Eduardo Javier Mejías (26), Nevdis Infante Hernández (31), Yainer Olivares Samon (21) y Maikol Guerra Morales (25).
Cuba pidió el jueves a Estados Unidos la "devolución inmediata" del avión civil desviado, así como de todos sus ocupantes.
Según fuentes cubanas se trata de un DC-3 Aerotaxi de la Empresa Nacional de Servicios Aéreos (estatal). Entre los pasajeros viajaban cinco niños, se indicó.
El pasado 11 de noviembre, un viejo y pequeño monomotor del gobierno cubano utilizado en tareas agrícolas, fue secuestrado por ocho personas para huir de la Isla y aterrizó sin incidentes también en Cayo Hueso.
Los ocupantes de este avión obtuvieron permiso para permanecer en Estados Unidos, como ocurre generalmente con todos los cubanos que logran llegar a tierra firme estadounidense. |