AFP/ La Habana. Las reacciones de condena al gobierno de Cuba, por el fusilamiento de tres secuestradores de una embarcación y el encarcelamiento masivo de disidentes, que incluyeron protestas de diversos sectores de izquierda en el mundo, fue recibida el lunes con beneplácito por dirigentes de la oposición interna.
"Me alegra muchísimo el despertar de la izquierda democrática latinoamericana y mundial ante la realidad de Cuba", dijo a la AFP el presidente de la ilegal Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, Elizardo Sánchez Santacruz, al comentar las repercusiones internacionales de esos episodios.
Para el dirigente opositor, quien se autodefine como socialista, ya "se había demorado mucho ese despertar de la izquierda" respecto a Cuba.
Sánchez Santacruz saludó el que se hayan expresado "amplios sectores progresistas que hasta ahora mantenían ojos y bocas cerrados ante la inaceptable situación que vive el pueblo cubano".
Intelectuales, políticos y partidos de izquierda de Europa y América Latina han expresado en estos días su rechazo a las acciones del gobierno de Fidel Castro, que la semana pasada encarceló a decenas de disidentes y fusiló a tres secuestradores de una embarcación, tras someterlos a juicios sumarios.
"Durante décadas nos sentimos solos en nuestra lucha, respecto a nuestra familia ideológica", dijo Sánchez Santacruz y precisó que el régimen de Castro no puede ser calificado de socialista ya que "es un país donde se da una masiva y absoluta explotación del trabajador cubano".
Denunció que los obreros de la Isla "son los más explotados del continente, sin tener ningún derecho a protección sindical y mucho menos a formar un partido obrero que defienda sus intereses".
En Cuba rige legalmente un sistema político de partido único, el Partido Comunista, y no existen sindicatos de oposición.
Entre las reacciones más significativas de la izquierda figura el pronunciamiento del Premio Nobel de Literatura José Saramago, hasta ahora simpatizante de la revolución cubana.
Saramago, quien reside en España, publicó una declaración en el diario El País en la cual critica duramente la ejecución de los tres secuestradores en la Isla y la represión contra la disidencia.
"Hasta aquí he llegado. Desde ahora en adelante Cuba seguirá su camino, yo me quedo", dice el escritor portugués en su texto.
"Disentir es un derecho que se encuentra y se encontrará inscrito con tinta invisible en todas las declaraciones de derechos humanos pasadas, presentes y futuras. Disentir es un acto irrenunciable de conciencia. Puede que disentir conduzca a la traición, pero eso siempre tiene que ser demostrado con pruebas irrefutables", agrega y califica de "desproporcionadas" las condenas a los opositores.
En cuanto a los fusilamientos, Saramago afirma que "Cuba no ha ganado ninguna heroica batalla fusilando a esos tres hombres, pero sí ha perdido mi confianza, ha dañado mis esperanzas, ha defraudado mis ilusiones". |