No existe ninguna posibilidad de que Panamá se integre al eje La Habana-Caracas, tras la victoria de Martín Torrijos, aseveró a Encuentro en la Red Marcelino Miyares, presidente del Partido Demócrata Cristiano de Cuba (PDC, en el exilio).
"Este hombre (Martín Torrijos) es otra cosa, no tiene nada que ver con el ideario de su padre", expresó el dirigente luego de asistir a la toma de posesión del nuevo mandatario de ese país.
Miyares agregó que el presidente "es un profesional de 41 años, pragmático, no es populista como Chávez, todo lo contrario"; además de considerar que el país centroamericano "mira mucho a EE UU", por lo que la política exterior va a ser "muy en armonía" con la norteamericana. "Si habrá un eje aquí, será el eje Panamá-Washington", vaticinó.
En cuanto a las relaciones con Cuba, el dirigente confió en que la influencia que va a tener la democracia cristiana en el gobierno contribuirá a que Panamá asuma en su agenda el tema de los derechos humanos en la Isla.
"Eso se va a introducir de una manera u otra. Incluso por el impacto que los exiliados cubanos que viven en Panamá tienen en esta sociedad. La esposa de Torrijos es cubanopanameña. Hay una conexión cubana muy fuerte en este pueblo", agregó.
Sin embargo, el presidente del PDC no cree que en estos momentos esa sea una prioridad para el nuevo gobierno, porque "éste estará de lleno en los problemas internos de Panamá, que son grandísimos".
Martín Torrijos, del Partido Revolucionario Democrático (PRD, socialdemócrata), ganó los comicios panameños en alianza con el Partido Popular (PP, democristiano). A esta última formación le ha correspondido una de las vicepresidencias del gobierno.
"Una de las personas más importantes del Partido Popular es Ricardo Arias Calderón, quien conoce de primera mano la situación interna de Cuba. Por otro lado, Arias fue vicepresidente de la Internacional Demócrata Cristiana, y mantiene la posición de ésta respecto a la situación cubana", argumentó Marcelino Miyares. |